Pues como ya dijimos, estos chicos del basket parece que quieren enterrar las voces que les daban por muertos y al más puro estilo del Cholo Simeone van dándole la vuelta a las apuestas y partido a partido están tocando la puerta de las medallas a base de sacar cada jugador lo mejor que tiene dentro. Y es que parece que los españoles se han encerrado en una habitación y han juntado las manos haciendo una piña para decir: ¡Esta es la última vez que estamos juntos. Vamos a hacer algo grande!. Y ello, porque tras las dos derrotas iniciales nadie apostaba a que estuvieran en cuartos hoy, y que se fueran a jugar esta tarde el pase a la lucha por las medallas contra Francia cuando, para empezar, parecía que estábamos fuera, o que en el mejor de los casos entrábamos cuartos y nos enfrentaríamos a los americanos.

Sin embargo, al final lo hacemos como segundos de grupo, tras una sorprendente Croacia y con los anfitriones, Brasil, que nos ganaron a nosotros, fuera de la lucha por las medallas. Así es el deporte, donde puedes caer y levantarte otra vez.

Pero al final triunfa quien es capaz de quedarse de pie por muchos golpes que te hayan dado. Pero, no lo olvidemos, así es también la vida misma, donde al final solo sobreviven en el trabajo y en cualquier orden los que no terminan de caer al suelo, por mucho que les golpeen.

Pero la lucha por las medallas va a ser durísima, porque esta tarde nos queda un durísimo choque con una Francia que solo perdió de tres puntos con los americanos, y que si les vencemos luego nos tocará jugarnos con ellos en semifinales la lucha por las medallas. Eso si los EE.UU. son capaces de vencer a los argentinos, ya que si estos repiten el encuentro que jugaron contra Brasil pueden dar otra sorpresa y dejar a los americanos fuera de las medallas.

Pero la lucha de hoy con cuatro choques de infarto será tremenda con dos ex yugoslavos como Serbia y Croacia frente a frente, los Australianos, llenos de jugadores NBA contra los lituanos y nosotros frente a la vecina Francia, con muchas heridas pendientes de curar con ellos. Les ganamos en 2009 (cuartos), 2011 (final), 2012 (cuartos) y en la semifinal de 2015, pero en 2013 (semifinal) y 2014 (cuartos) nos ganaron ellos, aunque lo más reciente fueron los 40 puntos y 11 rebotes que obtuvo Pau Gasol en Lille en la fase final del Eurobasket.

Hoy será otra vez otra final, aunque las dos últimas que hemos tenido lo eran y despachamos a los Lituanos de 50 puntos y a los correosos argentinos de 19. Pero ahora ya están las medallas en juego y el que pierda se va a casa. Ya no hay otro partido. Ahora o nunca.

Otra oportunidad de escribir un inmenso capítulo de coraje y fe en la victoria de este irrepetible grupo de amigos.