Información

Información

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Marc Llorente

Atracciones de feria

La frágil escenografía del proceso de independencia catalana es solo un pueril desafío que exige corazones con freno y marcha atrás. Más que la ley en la mano y las acciones legales, se requiere explorar una tercera vía como posible y eficaz respuesta. No dejar mártires en el camino, ni contribuir a ponerle la quinta velocidad al asunto. En suma, abrir una senda política de mutuo acuerdo por la que se camine mejor y unos y otros abandonen las fantasmadas habituales. Ya se debería haber hecho con el objetivo de no haber llegado al punto en el que se halla la grotesca situación. Y habrá de hacerse para salir de este túnel de feria. En fin. La feria va por barrios con sus charlatanerías y atracciones variadas. Resulta infumable que el PP, con el lodo al cuello, haya gobernado, ahora en funciones y con perspectivas de seguir, como si no tuviese nada que ver con los capítulos del sucio culebrón nuestro de cada día. A lo mejor deberían darse la mano los demás grupos por higiene democrática. Para desbloquear y ofrecer soluciones. Logra la presidencia quien reúne mayoría parlamentaria. Aun a riesgo de que le abofeteen, ¿Rajoy debe dar la cara en una sesión de investidura donde conste su programa de Gobierno? El «constitucionalista» Partido Popular viene pisando la Constitución pese a que presuma de lo contrario. ¿Vale simplemente el ventajismo de acudir a la Cámara con apoyos previos? Investir o no investir es el requisito para que puedan convocarse otras elecciones? El líder socialista, al menos de momento, tira por la ventana el título de candidato y defiende el «no, no, no» a la continuidad de Rajoy al frente del timón. Le avala el Comité Federal, pero González y otros nombres del parque jurásico apoyan la abstención en la segunda ronda. El misterio en esta feria es casi nulo porque el final es obvio. ¿Rivera terminará dando el «sí» tras obtener algún dulce? ¿Sánchez se abstendría entonces sin negociar nada? De un modo u otro, sálgase ya de los laberintos. Dejen los espejos cóncavos. No den más vueltas en la noria, ni en el tren de la bruja, patrocinado por Soraya y Cospedal, que maneja Rajoy con la escoba de los nuevos comicios.

Lo último en INF+

Compartir el artículo

stats