Resulta sorprendente que se establezcan nuevas entidades, colectivos o lobbies empresariales donde no se cuente con la principal asociación que representa este sector. No parece que a nadie le llame la atención que desde hace meses se quiera desmembrar el entramado empresarial de la Comunidad Valenciana, fomentando un centralismo absurdo, que estoy seguro que no beneficia a nadie. Por ello, insisto en que no se entiende que una confederación de entidades que aglutine al conjunto de las patronales hoteleras y de restauración no cuente con Hosbec, todo un referente en la Comunidad Valenciana y en el conjunto de España.

Una vez más, pensar en determinadas uniones para desunir intereses particulares de la provincia de Alicante es el recurso más fácil. La pregunta es, una y otra vez, por qué siempre terminamos pensando (o tenemos la sensación) que se pretende desequilibrar la balanza al lado opuesto de donde se encuentra la provincia de Alicante. Por qué siempre que se habla de uniones se sitúa el nudo neurálgico en la ciudad de Valencia, ni siquiera en la provincia. Por qué no se aprovecha el buen hacer de terceros, como ocurre con Hosbec, para construir un proyecto que fuera conjunto y que partiera del modelo que sí funciona, como es la asociación que tiene su sede en Benidorm. ¿Por qué? Y aunque yo hago la pregunta insistentemente, nadie responde.

Pero esta sensación se produce en tantas y tantas esferas en la que se confunde coordinar y sumar esfuerzos con centralizar y concentrar la toma de decisiones en cuántas menos manos mejor. Una tesis que hace pensar aquello de quien reparte se queda la mejor parte. Una situación que es siempre injusta, pero que cuando se trata de la cuarta provincia de España, como es Alicante, es si cabe más incomprensible.

Los alicantinos estamos aquí para construir, no para enfrentar. Pero para construir hace falta establecer diálogos, no imposiciones ni por vía del decreto, ni por la vía de la asunción de entidades novedosas concebidas y ejecutadas desde la división. Queremos contribuir al progreso de la Comunidad Valenciana, queremos ser parte de esta Comunidad, queremos contar con la voz y la palabra de aquellos que tienen mucho que decir. Seguramente ni más ni menos que otros, pero sí en igualdad de condiciones, cuando hablamos de empresa, de economía o de turismo, modelo de éxito y de pujanza económica de la provincia de Alicante.

Tenemos que evitar la generación de superestructuras que terminen sobreviviendo del subvencionismo, una enfermedad que le ha costado más de un disgusto a COEPA y que tan pocas alegrías ha generado. Puesto que se convierte en una pesada losa que limita los movimientos, las decisiones y la capacidad de defender el origen primigenio que nos creó como entidad.

Creo que es más fácil tender la mano, ser constructivo y no exclusivo. No marginar al que más sabe, ni al que menos; pero sí escuchar, poner toda la inteligencia y la mayor de las sensibilidades.

Cualquier entidad, confederación, asociación o lobby que tenga el turismo como materia propia, tiene que contar con Hosbec como la asociación patronal más importante de la provincia de Alicante. No, no es que su participación sea obligatoria, sino más bien, es necesaria. Se puede funcionar sin Hosbec, pero nunca será a favor de impulsar los intereses del sector ante las diferentes administraciones, entidades nacionales o internacionales de turismo. El fin será otro, y en ese caso, el medio se entiende que no pase por la patronal benidormí como si hubiera que someter a un aislamiento terapéutico a Hosbec.