Preguntarse si Alcoy acabará teniendo un nuevo PGOU es hoy una cuestión lícita. Con el panorama que hay en el salón de plenos, cualquier cosa es posible; somos como el extinto parlamento nacional, a escala reducida. Razón no les falta a C's y al PP con respecto al polígono mancomunado: ni está en Alcoy -por tanto, es ajeno al PGOU- ni es algo tangible. En urbanismo dos años no son nada y a Gomicia le puede acabar costando un serio disgusto si provoca la pérdida del único sostén que tiene. A partir de ahí, qué pueda hacer Guanyar en un futuro es imprevisible, mientras que los votos de Compromís cuentan menos, porque no alcanzan a procurarle al PSOE una mayoría suficiente.
No deja de ser una ironía del destino la coincidencia de siglas. En el PGOU del 89, actualmente en vigor, hubo una trifulca monumental del PSOE, PP -que se había refundado desde AP pocos meses antes- y Partido Comunista... con el CDS. El equipo del que fuera portavoz Antonio Gomis puso en duda la transparencia del proceso y los tres ediles suaristas acabarían siendo amonestados formalmente por el pleno. Veintisiete años después, el PSOE ha necesitado el respaldo de C's para sacar adelante el modelo del nuevo PGOU. Veremos en que queda. Algún día.
