O al lado, o prendiendo fuego, o viviendo el fuego? o incuso provocando unas hogueras que hasta dejan el espectáculo de las nuestras, las de Alicante, esas que este viernes pasado dejaron un recuerdo imborrable. Hoy, este domingo post Brexit, en elecciones por segunda vez importantísimas en España entera y en la ciudad de Alicante, por si faltaba algo, jugándose la subida de un equipo, el Hércules, que lleva muchos años buscando denodadamente su nuevo destino (que será seguro brillante, como la gente de esta tierra...), este domingo promete? Después de «quemarlo» todo bailando hasta el amanecer, mientras atónitos acudíamos a la locura inglesa más descabellada de los últimos cien años? este es ese día donde las cosas parece que tendrán una segunda «hora de la verdad» y que, ante todo, nos tocará decidir, con más o menor fortuna, que queremos para nuestras vidas. Y es aquí donde me toca darle caña al asunto de los ingleses para después volver a nuestras «cositas», es decir, a lo que nos afecta directamente y nos va a afectar por arrobas? mientras entrevistaba a una pastelera genial, Violeta Tuzenko, que desde su Ucrania natal ahora elabora unas cocas antoñinas increíbles, no paraba de pensar que tenía narices que una mujer estupenda como ella, digna del papel protagonista de la peli Chocolat, tuviese la valentía de crear un negocio aquí y hacerse de aquí, vivir como este «aquí» y hacer que llamamos mix cultural. Sí, narices? creyendo en esta Europa que otros pretenden abandonar con un egoísmo alucinante, y, encima, justificándose moralmente. La bolsa de Londres ha roto, las de nuestra Europa han «petado» a la baja, casi como el búnker de Hitler en pleno ocaso de su vida, y la cosa promete? ¿Qué vamos a hacer con mis colegas residentes de «el Pinós», que viven tan panchos entre bicicletas, periódico ingles diario, cervecitas, hamburguesería de diseño y pub a la Chester en pleno viñedo de la zona, o con el Rincón de Loix y toda la «tribu» inglesa que viaja en Easy Jet por dos duros y entra en esta España de la UE con toda comodidad? ¿O con los concejales ingleses residentes aquí? ¿O con lo dos millones de europeos, entre ellos unos cuantos españoles y en particular alicantinos que están por allí? Pues ahí radica la cuestión? ya no te digo lo de Gibraltar? jejeje, eso ya es «para nota». Así que mientras, a ver si todos nos planteamos un futuro como dios manda? porque me gusta poco ver y escuchar lo que estoy atónita observando. No me parece que tenga ningún estilo el enfrentamiento entre unos y otros más allá de lo puramente dialéctico, no me gusta la falta de modales desde la derecha y la izquierda, y hasta en el centro. No me gusta que no se escuche a nadie. No me gusta el radicalismo de ninguna parte, y menos me gusta la estupidez permanente, la demagogia de todos, pero de todos, y el propiciar brechas entre los españoles que no se zanjarán, por lo que veo, jamás. Me gustaría un domingo de paz, de serenidad, de planteamientos de futuro en serio, de ciudadanía responsable, de generosidad, de contribución, de defensa de lo que se cree pero sin atacar a unos y otros con crueldad y falta de dialéctica, una nueva tierra que tuviese el brillo de nuestra mirada hacia la construcción de un futuro común. Tenemos un mal, ese que nos arrastra desde tiempos de otros siglos ya pasados, ese que nos hace geniales y a la vez eternos enemigos de nosotros mismos, y por fin, habría que pasar página a esa historia triste y lamentable que tanto mal ha hecho en nuestra actual vida. La crisis, la vida, la economía, la cultura depende de nosotros y nuestros hijos, esos que esperan que les dejemos un mundo cuanto menos habitable, son testigos de que hoy mismo empecemos con buen pie. Si no, nos veremos cómo este viernes se vio Londres, con la centralita ardiendo de peticiones de segunda consulta? pues haberlo pensado antes, a ver que «fem del caldo» ahora chicos británicos. Buen domingo y feliz dia, ese en el que la fiesta de la democracia es la Historia misma.