La atención virtual para especialidades médicas que se empieza a aplicar en la sanidad pública hace más de un año que se pone en práctica en la sanidad concertada, la que prestan los hospitales públicos de gestión privada. Antes, tras verificar el resultado en una prueba, el médico de familia te enviaba al especialista cuando así lo consideraba necesario. Ahora, pone cara de póker ante un afligido enfermo que no acaba de asumir el resultado y asegura que realizará una interconsulta con el especialista, vía ordenador, para ver qué hacen. Al cabo de un par de días, el mismo médico de familia tiene la amabilidad de llamarte por teléfono para decirte qué ha decidido el especialista. Lejos de dar tranquilidad, lo único que consigue Sanidad es que acudas raudo a la medicina privada para recibir la atención que no te dieron y que merecías sin necesidad de tener que pagar dos veces por ella, lo que es una evidente negligencia.
