No se dejen engañar por los cantos de sirena de los políticos de nula autocrítica que ya empezaron ayer a jugar al yo no he sido en el fiasco de prohibir abrir al comercio de Maisonnave los festivos y domingos. Quien tomó la decisión incumpliendo la legalidad fue el pleno del Ayuntamiento de Alicante a propuesta del alcalde. PSOE, Guanyar, Compromís y Ciudadanos sacaron la medida adelante sin dar trámite de audiencia a los afectados. A partir de ahí, el Consell le dio la bendición y anuló la apertura en festivos en esa zona. Ni los técnicos jurídicos del Ayuntamiento ni los de la Generalitat advirtieron de que se tomaba una decisión a todas luces ilegal; tanto, que ha sido necesario revocarla para evitar males mayores. Tras semejante desastre que pone en evidencia a funcionarios y políticos la cuestión ahora es qué hará Gabriel Echávarri, quien abanderó el proceso desde el principio. ¿Volverá a iniciar el proceso respetando los trámites legales o lo dejará correr?
