La mañana de Gloria hace honor a su nombre, salvo que llueva o nieve -algo que ha ocurrido alguna vez-, y es un momento entre los más «mágicos» de las Fiestas, por usar una expresión socorrida. Durante mucho tiempo, este desfile (al igual que el Infantil) ha reflejado la realidad de una Fiesta y, ahora, se dispone a hacerlo con otra distinta. Ocurrió el año pasado con la celebérrima Diana Marrakesch y puede suceder el 16 de abril de 2017, cuando el sargento moro ponga en marcha su arte en la Gloria. Puede que sea a través de alguna escuadra mixta o, más probablemente, de la doble formación. Si lo de los Chanos tiene, a mi modo de ver, escasas posibilidades de triunfo, lo que propone la directiva suele ser palabra mayor para muchos representantes festeros. Sin desechar más alternativas, cabe esperar una solución cuerda que permita a la Fiesta seguir por el camino de la normalidad, algo que, a la postre, es lo mejor que podría llegar a ocurrir.
