Hace aproximadamente un mes, en este mismo medio, nos referíamos a la decisión de reducir la Zona de Gran Afluencia Turística a la fachada litoral, el Puerto y el casco antiguo, excluyendo la avenida de Maisonnave, que el alcalde de Alicante había justificado la medida en que el Ayuntamiento debe «velar por la igualdad de oportunidades» de los comercios de la ciudad, asegurando que «lo que es un problema es que unos tengan libertad de abrir los domingos y otros no». Entonces le dimos una solución: la libertad de horario comercial en toda la ciudad.

Pues bien, el alcalde, rectificó ayer (19/02/16) anunciando que todo el comercio de Alicante, pequeños establecimientos y grandes superficies podrán abrir los domingos y festivos dentro de un mes. A cambio, el alcalde asegura haber alcanzado un «pacto de caballeros» con todas las grandes superficies por el que éstas se comprometen a crear 625 puestos de trabajo eventual y a que ningún empleado de la plantilla tenga que trabajar más de 13 festivos al año.

Sin embargo, como nunca llueve a gusto de todos, en este mismo medio se anuncia que el pequeño comercio, contrario a la apertura en festivos de Maisonnave, y aunque las asociaciones valoran que se genere empleo, se oponen porque les perjudica (¿).

La pretendida política de contentar a todos es muy complicada; ya se sabe, no se puede sorber y soplar al mismo tiempo.

Según la cronología de los hechos, hasta donde he entendido, el pequeño comercio en la zona de Maisonnave nunca ha dejado de tener libertad de apertura, por lo que no está contra la libertad de apertura como tal, sino contra libertad de apertura de las grandes superficies.

Los que entendemos que el comercio es una actividad relacionada con la economía, con la oferta, con la demanda y, sobre todo, con los deseos del consumidor, mantenemos la línea de la libertad horaria de los establecimientos; son los comerciantes ofertantes y los consumidores demandantes los que deben ponerse de acuerdo cuando y a qué precio realizan una transacción.

Las declaraciones del alcalde en cuanto a la creación de empleo en cuanto al «pacto de caballeros» sobre la creación de empleo y el límite de 13 festivos de trabajo al año, indudablemente estén relacionados con su gestión, pero creo que la creación de empleo es una función que corresponde a los empresarios y el control de los festivos trabajados es del ámbito sindical.

Ante la noticia, me pareció apreciar la imagen de Don Eleuterio Maisonnave y Cutayar más relajada, ante la expectativa de no aburrirse los domingos. Pues Don Eleuterio, que en los últimos tiempos se entretenía, los días laborables, viendo pasar el tiempo con el ir y venir de los transeúntes en la avenida más comercial de la ciudad de Alicante, tiene una buena noticia: dentro de un mes, también va a disfrutar de la animación comercial los domingos y festivos con las únicas excepciones de los días de Navidad, Año Nuevo y Reyes, así como los de Santa Faz y San Juan.

Todo esto quizá tenga que ver con que el comercio, en Valencia, esté apostando por el incremento de horarios de apertura al público; pero no importa rectificar es de sabios, aunque no equivocarse también.

A mí, que resido en la zona de Maisonnave me alegra que el comercio abra los domingos y, además, lo prefiero; una zona terciaria como ésta, sin comercio, tiene un aspecto desolado los días en los que no se abren las tiendas y los restaurantes.

Alicante es, ante todo, una ciudad de servicios y, a pesar de haber sido tradicionalmente castigada con sus Alcaldes, el turismo, el comercio y la hostelería son una parte importante de su sustento. Si a estos sectores, en los que se basa la economía de la ciudad no se les atiende, se corre el riesgo de perder lo poco que tenemos. Y a los empresarios, pequeños, medianos y grandes, que son los verdaderos generadores de empleo debe atendérseles, facilitando las cosas desde el Ayuntamiento y no generando conflictos sin sentido, porque después del conflicto, el político puede irse a su casa, pero el empresario tiene que ir a atender su negocio.

A pesar de todo, Don Eleuterio, tenemos una buena noticia: parece ser que el comercio abrirá los domingos y festivos.

Y siempre que escribo sobre la ciudad en este medio, me acuerdo de que en una zona emblemática de Alicante, calle Castaños, fachada con el Teatro Principal, sigue existiendo un tramo peatonal con una extraña decoración de albero, junto con los restos de lo que algún día pretendió ser espacio ajardinado. ¿Nadie lo ha visto?