Si usted, querido lector, va al diccionario no encontrará la palabra «pavihueco». Encontrará la palabra pavipollo, que es el pollo del pavo. Esta palabra nueva que hoy les presento es una magna expresión que utiliza mi madre para dibujar determinados comentarios, o a determinadas personas, huecas de razonamiento o con comentarios alelados. Vaya por delante que no se trata de molestar, sino de reflejar lo que en cualquier barra de bar supondría el jocoso acontecimiento de interpretar los comentarios públicos.

Entremos en el tomate. El presidente de Cataluña, Sr. Puigdemont, quiso reírse del tribunal Constitucional Español, haciendo un «revival» de la mítica frase de un futbolista: «Tribunal constitucional, contigo empezó todo». A ese es al que han elegido las mayorías del 3% de las comisiones y las asambleas anti sistema. Cualquiera que recoja un discurso del gran President Tarradellas, verá que entre aquel y éste, no es que haya diferencias, es que no se pueden comparar. Un comentario más vacío y de barra de bar que ese, no se puede encontrar. Comentario «pavihueco», y en castellano, que lo dijo.

Un tal Borja Fanjul, concejal del Ayuntamiento de Madrid, del PP, dijo: «Prefiero tener un compañero que haya robado a uno que ponga bombas». Entre robo y robo, no querrán ustedes que elijamos muerte. Esta bazofia dictada en sede popular solo se puede atribuir a uno que no mereciera estar en la vida pública. Demasiados tontos y malhechores se están colocando en los puestos de representación del pueblo. No acabo a descifrar que alguien pueda pensar eso, y mucho menos decirlo. Comentario «pavihueco», anteponiendo el trinque a la muerte.

El alcalde de Zaragoza, el Sr. Pedro Santisteve, de Podemos, dijo que cargaba la compra de la gomina de su pelo para «poder estar presentable». Y no se le cayó el alma a los tobillos. Porque para estar presentable mejor refregarse las rodillas y los codos antes de salir de casa. Porque cuando alguien tiene que justificar lo absurdo es que le da lo mismo lo que la gente piense. Porque si nos han de joder, mejor que estén «presentables». Empiezan con la gomina, pero no faltarán los preservativos. Porque de la jodienda colectiva a la felicidad personal, va poco. Comentario «pavihueco», y yo con estos pelos.

Su jefe, el Pablo Iglesias, fue más explícito: «Ya lo dijo Monedero: somos una fábrica de amor. En las derechas no encontrarás tanto amor». Y le dio un beso en la boca a un compañero. ¡Olé! Esta es la nueva política. No faltará de nada. Porque él mismo aconsejó a Pedro Sánchez, que «si voy a ser su Vicepresidente, sería normal vernos pasear juntos». Y todos los periodistas en la sala se echaron a reír, como se escuchó. Esa letanía de ruedas de prensa de Pablo Iglesias nos va a traer días de gloria. Porque, ¿quién no espera ese besito en los morros de Pablo a Pedro? Por fa, no nos lo birles. Aún recuerdo en una corrida de toros en el burladero. Un burladero alto. Con lo bajito que soy, casi no adivinaba lo que allí acontecía. El Maestro Esplá, tirando de ironía, pidió una caja de Coca-Cola, para que yo me encaramase a ella y viese el ruedo. Por favor, esa misma cajita valdría para el beso de Pablo, más bajito, a Pedro, más alto. Comentarios «pavihuecos» de tono erótico festivo.

Y para remate nuestra concejala «La Roja». ¿Alguien puede decirles la diferencia entre el comentario en una barra de bar y en un acto público político? Quizás ellos, y ellas, quieran cambiar esto. Por eso sacar a relucir los puticlubs con tal desatino tendría la reprobación de cualquier tabernero. Porque en las tabernas, los chistes y las chuflas son de más calado. Deben de haber creído que entonar poemas de mal gusto, cambiar los Reyes Magos y despelotarse en capillas responde a la política de ayudar a la gente que no tiene ni para comer. Si lo consiguen, si hacen que la gente no sufra, a base de este circo baratillo, seré el primero en votarles. Mientras déjeme que le diga que «pavihuecos» de éstos pueblan los plenos de los ayuntamientos. No tendremos hueco en internet para colgar las chorradas que nos tienen preparadas. Esto no ha hecho nada más que comenzar. Gomina que no falte, que ya no es solo del PP.