Ahí quedan las citas, dobles citas para mejor entender, de esas llamadas a las urnas y el final de ese año taurino que se nos vino tan cargado de inquietudes y amenazas. Lo de las urnas, esa costumbre más o menos cuatrienal, en que los españolitos andan con las mentes cargadas de mensajería electoral con cada pretendiente a alcanzar el poder, de paso gozarlo, si las circunstancias lo permiten, que sí suelen permitirlo. Aunque, justo será reconocer, que no todo el monte es orégano y abundan amarguras, fracasos y decepciones que suelen enturbiar la fiesta. De todas maneras, sigue siendo, el poder, meta hondamente deseada y a la que se le suele dedicar, hasta el agotamiento y el desgaste en no pocas ocasiones, denodados esfuerzos. Incluso en pos y propósito del mejor servicio al logro del bien servir a la comunidad, a la Nación, a la Patria. Así pues, a votar llaman. Ese sistema electoral tan despilfarrador de millares de votos dicen que sobrantes. Mientras el dos veces milenario mensaje del amor que nació en Belén ofrece paz y bien. Ciclo que se va, ciclo que llega. En clave de Navidad...
Otro ciclo que se va y ya avizora el por llegar es el que entiende del toreo, sus avatares e inquietudes que no escasean por cierto. A pesar de los furibundos ataques de la grey «anti», demasiado corrosiva en el insulto y la desinformación. No entienden de tradiciones y argumentaciones, sí de descalificaciones y condenas. Hay otras vidas a las que respetar y proteger su derecho a existir en plenitud de derechos y deberes. Andan en la tarea, minoritaria todavía, de perseguir, prohibir y denostar la fiesta donde ejercen el poder administrativo. Niegan permisos y ayudas a pesar de lo que dictan las transferencias en materia taurina según norma ministerial. Un febrón de escasa duración en el tiempo, ya que, ejemplos no faltan, cuando dejen el poder, cumplido el ciclo cuatrienal, el toreo volverá de nuevo a su lógico e histórico ser en el fervor de la afición. De ciclo a ciclo. En clave de Navidad...
Las empresas avanzan intenciones, referidas sobre todo a Valencia, Castellón y Sevilla. Cambios de apoderamientos y cuadrillas. Nuevos nombres, nuevas ambici0nes y reconocimientos de méritos bien ganados en los ruedos. La afición mantiene el tono de su calor con actos culturales y conmemorativos: Club Taurino de Alicante, «Amigos de Nimes», Peña «Pacorro» en homenajes a ganaderos, literatos y toreros. De paso, se anuncia, grata noticia, el regreso de Adolfo Martín, mejor corrida del año, y la recuperación física de Manzanares. Por caminos de paz y bien. Doble final de ciclo. En clave de serena y feliz Navidad. Alicante. Diciembre.
