Ha sido sentencia inesperada. Creímos que Nuno Espíritu Impuro había ido a Singapur a recibir bendiciones y era un cuento chino. Ha ocurrido lo contrario. No ha sido exculpado. No le ha bastado siquiera un acto de contrición para obtener la salvación. Nuno, exentrenador del Río Ave, formaba parte de la invasión portuguesa. Parecía nueva batalla y derrota de Aljubarrota. El fútbol portugués tenía prestigio, pero formaba parte de las hemerotecas. Jorge Mendes es un tío muy listo y ahora nos colocará un nuevo entrenador de su cuadra y en lo tocante a futbolistas nos habría parecido suficiente que hubiera traído a los émulos de Colunna, Simoes, José Augusto y para la guinda del pastel, a Eusebio. No ha sido así. En Mestalla han aparecido en tropel jugadores de medio pelo. Hace unas temporadas el Deportivo de La Coruña descendió a Segunda con un equipo en el que más de la mitad de la alineación estaba formada por portugueses de Mendes.

En Sevilla la alineación valencianista, compuesta por un entrenador que tuvo el gesto, o sea, la cara, de anunciar tras la derrota que había dimitido por la mañana, apareció con siete jugadores del cupo de Mendes. Si tal fue su decisión hay que considerar que se marchó cumpliendo la última misión, la última barrabasada, al colocar en el equipo a Ryan, que pertenece a los negocios de Mendes. Dejar en el banquillo a Jaume, que ha sido el salvador del equipo durante varias jornadas, fue aquello de para lo que me queda de estar en el convento me cago dentro. También se puede interpretar que hizo el último guiño a Mendes con la esperanza de que le coloque en algún club desarraigado como es ahora el de Mestalla.

Hay que ponerse en lo peor porque todo apunta a que el intermediario portugués nos colocará a uno que sea su patrocinado o acepte su patrocinio, como hizo el chaval de la cantera Rafa Mir, al que bastó fichar por su empresa para debutar en el Valencia y en Liga de Campeones. Una desvergüenza más. Poniéndose la venda antes de la herida hay que preguntarse si, finalmente, nos va a caer encima Falcao, futbolista en horas bajísimas

al que Mendes traslada de la Ceca a la Meca y a los valles de Andorra.

Posdata.¿ Quién decidió el despido de Nuno: Lim o Mendes?