Al ángulo es, quizás, muchas cosas... Geometría, forma, esquinita y hasta cajón de sastre, pero lo que es ante todo, sin duda es punto de vista. Matriz de pensamiento, cristal por el que se ve la perspectiva de cada cosa... por ejemplo, el ángulo por el que veo ese fenómeno anglófilo llamado «black friday» es el del alucine ante el !!espectáculo!! No me digan ustedes que no es genial que la crisis dé lugar a que miles de españolitos se lancen al consumismo desmadrado y, cual «zombies» patrios pululen a empujones entre calles, «supermarkets», tiendas y espacios, en una horda compulsiva de búsqueda de cualquier cosa que tenga descuento y te puedas colgar como sea del «body». «L'Angolo» es también nombre, sin embargo, de lo que yo sí que me colgaría, gracias a gente maravillosa y emprendedora como Santi y José (mis favoritos «exLleros» como se llamaba ese pedazo de tienda modélica de Alicante llena de glamour). Un pedazo de bolsazo, de accesorio, de abanico, de pendiente y hasta de plato de porcelana divinísima, encima o en mis paredes, que merece la pena ver y comprar. El ángulo es también el anteojo con el que Daniel Juan de Rojas ha donado con una generosidad maravillosa la obra La transición al Oráculo para la Gala del Día Mundial del Sida en Madrid. Una obra de una suerte de surrealismo pictórico muy digno de este genio transgresor que habita Alicante y cuya imagen misma dice mucho ya de su talento. O el super ángulo de mi querido Juan Vidal, al que felicitaré el martes 1 de este Diciembre navideño en persona, por merecer y recoger el Premio Telva al mejor diseñador español en la gala más exquisita de la moda de nuestro país. Ese sí que es un ángulo anguloso y de perspectiva única, la carrera de un joven diseñador que es ya única en nuestra provincia y por el que algunos apostamos hace tiempo. Talento, amor por la profesión y ganas nunca le han faltado. Si acaso que nuestras instituciones hubiesen apoyado un poco más este negocio que de la supuesta frivolidad hace que miles de personas consuman, compren y generen el PIB del que luego vive el «personal». Y de esta guisa hablaba algún empresario de zapatos muy conocido que ha sido «culpable» de que este genio de la costura tenga, además, el Premio Nacional que otorga el Ministerio de Industria. Asimismo otro magnífico ángulo, el que forma el Portal en el centro de Alicante y en cuyo espacio celebró Carlos Bosch una cena única para los amigos que también hemos creído en él desde que empezó ese sueño. Porque sigue habiendo soñadores entre nosotros que se mueven, que ven otras maneras de hacer las cosas y que por encima de envidias son capaces de seguir haciendo Magia en Alicante, Elda, Elche, Alcoy.... Ese es el gran ángulo que hace falta. La única perspectiva que importa. Feliz Domingo.