Inglaterra inventó el fútbol, pero por los resultados obtenidos en la última década, todo parece indicar que se le ha olvidado cómo se practica. La pena es que también parece haber olvidado el «fair play», o simplemente la cortesía o la buena educación. Eso es lo que demostró el combinado británico impidiendo cantar su propio himno, ni tampoco el de Alicante, al coro del Colegio Inmaculada. Como muchos saben, todo lo que hace ese coro es para dar a conocer y ayudar a Nazaret. Lo que seguramente no sabe la Federación Inglesa de Fútbol es que parte de los ingresos que recaudaron el viernes son gracias a la cesión gratuita, altruista, que hizo Nazaret de 6.500 metros de aparcamiento junto al estadio Rico Pérez, para que se instalen cómodamente las unidades móviles de las televisiones, que financian todos estos acontecimientos.

¡Qué cosas! ¡Las ONG ayudando al millonario mundo del fútbol! El mundo al revés.