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Francisco Esquivel

Tirando con bala

Decididamente Ximo Puig ya ha encontrado a su fustigador en el sur. Siendo el estilete del pepé con más caudales a su disposición, el alcalde de Calp y presi de la Dipu correspondiente se lo ha puesto entre ceja y ceja. Mientras lo escuchaba exponer su hoja de ruta en la institución provincial caí en la cuenta de que salvo Ripoll, que es de mi quinta, el resto de los que la han comandado eran mayores y en cambio, cuando éste nació, uno tenía su trienio en el oficio. Desconozco si al titular del Consell le fastidia pero a mí, la otra historia, bastante.

Dirán ustedes: sin embargo reporta perspectiva. Eso sí, encima estaría bueno lo contrario. De hecho creo que no he conocido un caso tan atrevido en el que, al propinar cera al objetivo, no tenga remilgos en dejar ahí unos castañazos de consideración a los de la misma cofradía. César Sánchez blandió que no entiende que Puig quiera cargarse las diputaciones cuando éstas son las que se hallan en condiciones de ofrecer servicios por estar saneadas y que pretenda acaparar el oro y el moro con una deuda de 40.000 millones... generada en su inmensa mayoría por los de Sánchez que Dios guarde en el túnel del tiempo. A pesar del tono suave que le sale del interior, tiró con bala como digo. Acusó al rival de no querer verse a solas con él al igual que ha hecho Ximo con Mariano y de desear cargarse las provincias. En el caso de que fueran los tiros por ahí, malos tiempos para la música porque, queriendo descolgarse del Estado una parte de él, cambiar la actual disposición territorial del resto significaría dejar irreconocible el mapa y no ya reformar la Consti, sino hacer una nueva prácticamente. César Sánchez ha situado los ejes básicos de actuación en lo mollar para que el territorio se active y todo juega así a su favor para convertirse en nuevo referente. Otra cosa será que lo dejen. Los suyos, faltaría más.

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