Preguntarse quién hace la cultura artística es como preguntarse quién hace la arquitectura. Es de Perogrullo. La hacen los profesionales que se forman para ello, pero también la sociedad que habita las ciudades, las casas, y define los espacios y las estructuras con su uso. Es un diálogo entre el profesional, el entendido, y la sociedad. Por lo que, si un plan urbanístico lo tiene que diseñar el arquitecto, por su complejidad técnica, en diálogo con esta sociedad, también un plan de gestión de las artes plásticas para una ciudad debe contar con los artistas. En Alicante, hemos vivido durante muchos años una misma política cultural, una gestión en la que no se ha contado con sus profesionales. En alguna ocasión se acudió a los grandes nombres, para la dirección del MUBAG, Juan Manuel Bonet, o del proyecto SEA del Castillo, Pablo Rico, quien también dirigió La Asegurada, pero el sector en un sentido amplio no contaba. Cargos que con el tiempo fueron desempeñados por funcionarios, pero sin un proyecto concreto. Y la mayoría de los espacios de Alicante han sido dirigidos por el político, convertido en comisario, crítico, gestor, coordinador de exposiciones, programador cultural?, con la idea de controlarlo todo.
Un contenedor como el de la Lonja del Pescado, así como el del MACA, con una de las mejores colecciones de arte del siglo XX, deberían ser el centro de referencia de la ciudad, como lo es el CAC para Málaga. En los textos que leemos en las páginas web de los museos, también en la del MACA, uno de sus objetivos es el diálogo, la conexión del museo con la ciudadanía. Pero, en el MACA, ¿por qué se teme tanto el diálogo con los artistas? Este es un museo que, a pesar de ser el producto de la donación de un artista, no tiene relación con los artistas de la ciudad, ni de la provincia. Las exposiciones no cuentan con la creación que se está desarrollando en el ámbito cercano, que es su principal área de influencia. ¿Qué sentido tiene un museo que se aísla de la realidad que bulle a su alrededor?
Esta tarde, en el MACA, tiene lugar la primera reunión del concejal de cultura con los artistas y los profesionales del sector, para hablar de la gestión de la cultura en Alicante, aunque parece que el concejal ya ha tomado sus decisiones: el MACA no es sitio para los artistas de Alicante. Decisión que plantea un debate que no existe, como si ACOA, la Asociación de Artistas Contemporáneos de Alicante, demandara la subvención o la exposición de sus miembros, y no, solo y fundamentalmente, demanda una colaboración estrecha en la gestión, es decir, que las opiniones del sector profesional puedan decidir, en competición con las de otros patronos, el destino que se le pueda dar al MACA, partiendo de las buenas prácticas que se están estableciendo en la mayoría de los centros en España, como el concurso público para seleccionar el mejor proyecto y director/a, para el museo.
