Se puede interpretar que la campaña del Gobierno en relación a la violencia de género hace responsable a las mujeres: «Mujer: depende de ti». La ola de asesinatos que se produjo este verano pasado (no faltó quien dijo que un factor era el... calor) debe haber motivado esta campaña. El lunes pasado tres mujeres fueron asesinadas y el martes otra y cuando se publique este texto, puede que se produzcan otras víctimas. ¿Depende de las mujeres? Conviene recordar que en el 2014 el 44% de las denuncias fueron archivadas, se les negó medidas de protección, que por otra parte la experiencia indica que no son efectivas. Estos crímenes deben ser abordados como un problema de Estado, reconociendo que hasta ahora la sangría no ha disminuido.
Hablar del calor, del consumo de sustancias, de locura, colaboran para que no se profundice en el problema. Se llama genocidio a lo sufrido por los armenios, genocidio al practicado por los nazis. En este caso se trata de un genocidio gota a gota. Según las Naciones Unidas en el mundo todos los años son asesinadas unas cien mil mujeres.
¿Por qué tantas mujeres no denuncian? Los motivos son muchos: miedo, sentirse desprotegidas, «perdónalo, fue un pronto, es un buen hombre», los hijos: ¿cómo les perjudicará?, situación económica, etcétera. Cuando una mujer retira la denuncia es como si la violencia no hubiera existido, cuando alguien roba y la víctima retira la denuncia ¿el robo no se ha producido?, ¿el perdón significa que no se ha cometido un delito? Aunque se retire la renuncia es la Fiscalía es la que debería intervenir. Se trata de un asunto en que la vida de una persona está en peligro y al Estado le corresponde ampararla.
En este drama es importante cuidar el lenguaje. Lo de violencia de género es como disimular la gravedad del asunto. Se trata de crímenes contra las mujeres, se trata de que miles de ciudadanas corren el riesgo de ser asesinadas brutalmente en cualquier momento. El «recorticidio» también se ha producido en este terreno, hoy las mujeres están más expuestas que hace cuatro años y por supuesto no depende de ellas que se incremente el presupuesto. Preocupa mucho el terrorismo del llamado Estado Islámico y con razón pero las parejas y exparejas de las asesinadas sí que son un peligro cotidiano. Doscientas personas murieron en los atentados de Atocha, pero desde aquel entonces más mujeres han sido asesinadas en España.
El pasado lunes día 5 tres mujeres fueron asesinadas pero la repercusión de estos crímenes, cuando ya no hace calor, ha sido poco significativa. Quizá convenga alguna foto como la del niño kurdo muerto en la playa.
