Ahora que estamos viviendo tiempos convulsos, también en el deporte, y en pleno mes de fichajes galácticos en el mundo del fútbol, y cuando este verano hemos sufrido noticias de toda índole: que si tal equipo desciende de categoría por no pagar, que si tal capitán ha sido traspasado a un equipo portugués por la puerta de atrás, que si tal equipo se ha gastado una ingente cantidad de dinero para intentar ganar no se sabe qué etcétera, yo quiero hacer una reflexión sobre el deporte de base, no de competición y, más concretamente, sobre una persona, vecino de Alicante, que ha hecho una «machada» en tierras americanas. Estoy refiriéndome a José Manuel Domenech, ultra maratoniano en sus ratos libres, que ha sido el único español en categoría masculina y que ha finalizado el pasado domingo los 160 kilómetros de la «Trail 100 millas Run de Leadville (Colorado)» en el puesto 151 de 800 participantes y con una marca de 28:16:14. Es una auténtica heroicidad para alguien que vive al nivel del mar.

Sudoroso, más flaco que cuando empezó su aventura en la línea de salida, exhausto del cansancio, ya que la carrera se realiza a más de 3.200 metros de altitud y, por tanto, hay menos concentración de oxígeno, es como ha terminado nuestro convecino y amigo, pero enormemente feliz de la «hazaña» conseguida porque él no es un profesional del deporte y, sobre todo, feliz por su familia -mujer e hijos- que le han acompañado por tierras de Colorado (USA), y feliz por haber tenido a su lado a sus amigos y miembros del equipo de apoyo: Yeyo, Juanito y David.

La gesta de este educado señor del deporte es para aplaudir. Ama el deporte, corre todos los días del año por el Cabo de las Huertas o por la Serra Grossa -cuando unos todavía estamos inmersos en dulces sueños, el ya esta abrochándose sus zapas de correr-, pero ama, por encima de todo, a sus tres pequeños que en más de una ocasión se los lleva a alguna cima que otra de esas que nos rodean, y que para los que hemos disfrutado con la montaña nos hace refrescar memorias y peripecias de otros tiempos, para vivir junto a él la naturaleza, la libertad, el aire puro y la montaña. José Manuel es el deportista en estado puro, y la preparación que ha llevado desde que le confirmó la organización de la carrera en Leadville su participación ha sido metódica; ha perdido varios kilogramos de peso en unos pocos meses y sin esta preparación no hubiera sido posible terminar en alta montaña una ultra maratón de 160 kilómetros.

Mientras unos deportistas, llamados de élite, están preocupados por sus millonarios contratos, otros, mucho más humildes pero con un corazón que no les cabe en su capacidad torácica, disfrutan desde el anonimato de un deporte y de unas montañas como nadie lo hace. Vivir junto a amigos y familiares de una experiencia única ha sido lo mas grande que le ha ocurrido deportivamente a este ciudadano afincado en Alicante desde hace muchos años. Lo dicho, felicidades crack porque eres un gran deportista, pero eres mejor persona. Ni más ni menos.