El circuito de Indianápolis está considerado como la capital mundial de los deportes de motor y es la instalación deportiva con mayor capacidad de espectadores del mundo con 275.000 plazas permanentes, más 125.000 supletorias que se montan para la celebración de las 500 Millas que es la competición automovilística por excelencia de EE UU. Se inauguró en 1909 y el firme de la pista original era de ladrillos.

Posteriormente, poco a poco se fueron reemplazando los ladrillos por asfalto hasta completar el cambio en 1961, dejándose intacta una yarda (0,91 metros) en la línea en su estado original, de ahí que sea conocido Brickyard.

Pese a que la primera competición que se celebró en este trazado y con la que se inauguró oficialmente esta instalación fue una carrera de motos, el mundial de motociclismo no llegó hasta 2008 y todo hace indicar que esta será la última edición de este GP ya que el próximo año está previsto que sea sustituido por Austria. Pase lo que pase, esta pista permanecerá eternamente en los anales de la historia del deporte alicantino. El 14 de septiembre de 2008, por primera vez desde que se fundó el campeonato del mundo, un piloto nacido en nuestra provincia, el alcoyano Nico Terol, ganaba una carrera puntuable para el mundial.

Fue una carrera épica marcada por las inclemencias meteorológicas. Los coletazos del devastador huracán Ike marcaron el desarrollo de las carreras de 125 y Motogp ya que la de 250 cc se tuvo que suspender. Las carreras se celebraron bajo un lío monumental por culpa del mal tiempo, la lluvia y el fuerte viento que incluso se llevó por los aires más de una carpa. En 125 cc luchaban por el triunfo Nico Terol y Pol Espargaró cuando la lluvia y el viento obligaron a dirección de carrera a parar la carrera en la vuelta 16, de las 23 que había programadas. Nico había pasado primero por meta en el giro anterior a que se exhibiese la bandera roja y por tanto era el vencedor ya que habían transcurrido dos tercios de carrera. Habían pasado 49 años y por fin un alicantino pisaba el escalón más alto del podio.