Una culta alicantina muy interesada por nuestra ciudad, me sugería qué hacer con mi denso archivo profesional, dado que si los políticos promueven las ciudades, los arquitectos las construyen y sus archivos son historia de las mismas. El deterioro sufrido por la nuestra contemporáneamente merece analizarse y quizá la historia que se expone a continuación, aunque tediosamente, pueda explicar como caso puntual, algunas de las razones de esta situación.

Recientemente se ha hablado mucho sobre el ADDA y lo que ha supuesto para la ciudad. Además se publicaba una entrevista con motivo de «La Mesa del Arquitecto», en la que tuve el honor de intervenir pidiéndome exponer su proyecto y la génesis del mismo. Espoleado por la sugerencia expuesta, me permito completarla, por tratarse de la más importante intervención urbana pretendida en esta ciudad.

Corría el año1968 cuando la Diputación Provincial de Alicante, presidida por D. Pedro Zaragoza Orts, promovió la construcción de un PALACIO DE CONGRESOS, a emplazar en los aledaños de la Santa Faz. El Proyecto estuvo expuesto en el Museo de Arte Contemporáneo de Madrid junto a otros seleccionados para el Premio Nacional de Arquitectura, pero la obra no se realizó (Información 22-09-68).

En el año 1973 se aprobó el P. General de O. Urbana de Alicante. Plan frustrado pues bajo pretexto de adaptación a la Revisión de la Ley, se anula prácticamente de inmediato, y con ello la ciudad que proyectaba, desarrollada a lo largo de la bahía, histórica vocación alicantina. El nuevo Plan, «no es modelo expansionista» (Memoria) y por ello suprimió su expansión hacia el sur, donde el primero situaba frente al mar la zona X, futuro asentamiento para edificios de capitalidad (Congresos, etc.) dentro de un tratamiento integral de la fachada marítima.

Y en 1980 la Diputación proyectó la edificación del MUSEO PROVINCIAL, consciente en dar solución al deteriorado enclave urbano de Campoamor, sobre suelo de ambas Administraciones (Ayuntamiento y Diputación). Sorprendentemente una decisión municipal paralizaba el propósito, y motivaba un contencioso que tardó en resolverse.

En 1984 ya liberado el solar, el Ayuntamiento promovió el Plan Especial "Fábrica de Tabacos/Campoamor", OI/4 del Plan General, plan de especial atractivo urbanístico en el que se emplazaba un «Complejo Cultural» en la manzana de Campoamor, respaldado por un convenio de estas Instituciones con la Consellería de Cultura en 26-09-88, que quedó bloqueado después de aprobado y expuesto al público (Información 25-09-88).

1.De las muchas soluciones planteadas hasta entonces y posteriormente es sin duda la mejor y más brillante. Se desarrollan los anteproyectos de: PLAN ESPECIAL, AUDITORIO, CONSERVATORIO Y MUSEO, pero queda paralizado otra vez por problemas entre ambas Administraciones. Las distintas Corporaciones ignoran, la posibilidad de dar a Alicante una actuación urbanística de primera calidad. En efecto:

Contempla la actuación integrada con una red viaria ordenada.

Sitúa un Auditorio y prevé la ubicación de un Museo y Conservatorio.

Resuelve los problemas de tráfico existentes, la creación de un aparcamiento zonal, y el ensanchamiento de aceras a la Plaza de Toros.

Establece un sistema de espacios verdes coherente, así como la realización de una infraestructura de prevención ante avenidas pluviales.

En 1992 renovadas las Corporaciones y reunidas de nuevo con Conselleria y el comisario de «Música 92» (06-04-92) relanzaron un «Centro Cultural», sustituyendo la propuesta anterior y en 1993 en fecha de 5 de Marzo, la nueva Corporación municipal varía de criterio de planificación, separando la manzana de Campoamor a desarrollar en un Estudio de Detalle y deja el resto para ordenar con un Plan Especial, anulando el PERI previsto que incluía todo el conjunto. Los concejales, se les ven desconocedores del asunto, y los servicios técnicos que proponen este equivocado cambio, les confunden. El Estudio de Detalle se aprueba con los votos en contra de PP, por no haberse redactado toda la unidad.

Simultáneamente la Diputación presidida por D. Antonio Fernández Valenzuela decide dar solución a esta manzana, ampliando el proyecto de Auditorio para posibilitarlo en su caso para CONGRESOS y el Pleno de fecha 3.DIC.92 presidido por D. Antonio Mira Perceval, aprueba iniciar los trámites administrativos, por 30 votos a favor y 1 abstención, aceptando la solución propuesta.

Este momento es el punto de inflexión de toda esta complicada historia. El acuerdo tomado por el Pleno de la Diputación, posibilita la solución del Complejo Cultural, superando controversias administrativas y políticas.

En 1993 se acometieron tanto el E. de Detalle, que ha fijado la ordenación definitiva del polígono, (Pleno municipal 15-04-93), como los nuevos proyectos de edificios -AUDITORIO, MUSEO Y APARCAMIENTO- desarrollados totalmente, acondicionando el primero para celebrar Congresos, hasta que Alicante dispusiese del edificio adecuado.

En 1997 la Corporación Municipal convoca concurso para la redacción de un proyecto de un PALACIO DE CONGRESOS en el Benacantil, con el objetivo de rehabilitar esta zona, y recuperar el centro comercial, equilibrando la ciudad, viéndose respaldada su pretensión por el Plan Especial (Pleno 04-10-91), que indica que «el remate visual desde Alfonso el Sabio, requiere una formalización contundente y urbana»; y con la aprobación y estímulo del Consejo Local de Turismo (10-01-97). Proyecto que quedaba en suspenso.

2. Durante varios años se efectuarán solo derribos basados en la ordenación tantas veces modificada y ya en 2008, la Diputación, presidida por D. Joaquín Ripoll Serrano, decide: Construir el AUDITORIO Y LA URBANIZACIÓN que finalizaron en el año 2.011, y en cuanto al aparcamiento proyectado, al que acompaña una solución alternativa, y el conjunto urbano, al día de hoy están pendientes de ejecutar. Asimismo se estudia la posibilidad de adaptación del edificio para Congresos, que exige pequeñas modificaciones.

En 2009, el Ayuntamiento promueve un PALACIO DE CONGRESOS en otro emplazamiento, «La Sangueta», estando en situación incógnita desde entonces, a pesar de los compromisos adquiridos.

Durante 30 años han sido considerados cinco distintos emplazamientos para este edificio de Auditorio - al interior, junto al mar, y en el casco urbano-.

Durante 30 años, las controversias políticas e indefiniciones administrativas, han impedido que la ciudad tuviese este importante equipamiento.

Durante 30 años se acusa una falta de criterio evidente, una ignorancia o respeto a la legislación y una falta de seriedad con los compromisos que se adquieren.

Cabe preguntarse si las Autoridades han sido conscientes de todo ello o sorprendidas en su buena fe y que esta ausencia puede ser indicio del desorden urbanístico imperante en nuestra ciudad, olvidándose de que una ciudad desordenada es un obstáculo para que su desarrollo cívico sea excelente.

Es pretensión del que suscribe que cuando pasados los años se finalice la actuación proyectada y sea reconocida su importante dimensión urbanística, pueda conocerse de primera mano «La historia de esta ilusión», pues ha sido el autor técnico, conceptual y estético, de todo ello, y el hilo conductor, paciente y apasionado, arropado en ocasiones por políticos tan ilusionados como él mismo por esta atractiva, histórica y trascendente actuación.