Así es, si así fue
Teatro Principal de Alicante
De Juan Asperilla.
Dirección: Laila Ripoll.
Producción: Andrea D'Odorico.
Se ofrece como una comedia humanística que constituye la historia de la conformación de la España moderna. Desde comienzos del siglo XV hasta mediados del XVI. Éste es el recorrido y ésta es la crónica de una época con su cadena de episodios y personajes. La tradición oral protagoniza la obra Así es, si así fue (España: de los Trastámara a los Austrias), y los cuatro comediantes se presentan ante el público para dar un paseo por el pasado y regresar al presente. Un viaje en el que se demuestra la similitud con la España de hoy porque existen problemas, sean políticos, sociales o de la condición humana, sin fecha de caducidad. Hay poderosos y oprimidos de una u otra manera. Esperanzas y desesperanzas. Todo se transforma, pero la ambición y los viejos fangos configuran una buena parte de la realidad actual. La combinación de textos y poemas ha dependido de Juan Asperilla, y Laila Ripoll es la directora de este montaje donde la palabra, en una especie de emisión casi radiofónica, tiene el sello de un teatro culto y popular a la vez. Unos atriles nos colocan ante una imagen de recital poético. Las lecturas interpretadas ofrecen narraciones y el trabajo de los protagonistas con una serie de papeles. Pero no todo es leído. Verónica Forqué, Joaquín Notario, Juan Fernández y José Manuel Seda actúan con el recurso del distanciamiento, sin la ilusión del diseño realista y situando el énfasis en la expresión verbal. La actriz airea sus peculiaridades interpretativas con ese inconfundible timbre de voz de chica ingenua. Una acusada fórmula que le ha servido para ganarse el interés de la afición. Notario da fe de su capacidad expresiva, y los otros dos actores muestran una notable eficacia. Los músicos Marcos León y Rodrigo Muñoz intervienen con su lírica renacentista. Romances, coplas y burlas que dan más aliento al espectáculo y enganchan las piezas del puzzle. Entre otras cosas, se habla del reino de Castilla, de un estado de reinos y del imperio. De las virtudes y los vicios de los Reyes Católicos. La versión oficial, por un lado, y la que trasciende el oficialismo, como las crueldades o los expolios que los españoles causaron en las Indias.
