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¡Ea, ea, ea, Montoro se cabrea!

«La renta media de la población española es inferior a la que había en el año 2000». Lo transcribo yo, pero la afirmación es del informe de Cáritas Precariedad y cohesión social. Análisis y perspectivas 2014. El que según Cristóbal Montoro «no se corresponde con la realidad» por lo que le advierte que «no provoque» esos debates (http://www.caritas.es/publicaciones.aspx). Aunque Rouco no defendió a Cáritas en su última perorata por motivos que sólo Dios sabe, a pesar de que para él Cáritas es una de las obras que justifica que el Estado siga subvencionando a la Iglesia Católica, a mí me ha picado la curiosidad por saber qué ha escocido al ministro de Hacienda.

La primera parte de indicadores sociales -renta y desigualdad- como he transcrito arriba, manda la renta media al túnel del tiempo, «es inferior a la que había en el año 2000». Pero no queda ahí la cosa: desde 2011 los salarios crecen por debajo de los precios (IPC). En esos mismos años el trozo de tarta de los salarios ha disminuido un 2,5%, cuando en los últimos 30 años nunca ha variado por encima del 1% anual. Eso es un récord histórico: el -2,5 en dos años. Y, en cuanto a desigualdad solo Bulgaria y Letonia de los 27 de la Unión Europea tienen unos índices superiores a los nuestros.

El empleo sigue con más récords: de paro con el 27,2%, el más alto en los diez años últimos; de empleo, el volumen más bajo desde 2003; de paro juvenil por encima del 50%, el doble que en la UE, ahora se ha reducido un poco, quizá porque sólo en el primer semestre de 2013 salieron de España 110 mil jóvenes menores de 30 años.

La pobreza monetaria ha alcanzado niveles que no veíamos en España desde hace décadas. Sólo nos ganan en tener una mayor proporción de pobres Rumanía y Grecia. Y en pobreza infantil sólo Rumanía. «Ocupamos los primeros puestos del ranking europeo en cualquier clasificación que se haga de indicadores de pobreza» afirma rotundo el comité técnico de la Fundación FOESSA -la que hace los estudios sociales de Cáritas desde 1965-. Esta parte, y lo de los jóvenes enfadó particularmente al ministro, menuda carita puso, que reclamó rigor. Mi sorpresa es que las fuentes que utiliza Cáritas son todas oficiales del Ministerio de Economía, del Ministerio de Sanidad, del IMSERSO, de las estadísticas oficiales españolas y europeas (INE y Euroestat) y hasta del Consejo del Poder Judicial. Por último, un nuevo récord: los hogares sin ingresos son el 4% -700 mil- el máximo en veinticinco años.

De colofón, este primer apartado del informe se refiere a los derechos sociales: dentro de las prestaciones monetarias la revalorización de las pensiones es el sistema que tiene un mayor impacto sobre la desigualdad y la pobreza, y en 2013 se ha consagrado un procedimiento de revalorización de las pensiones que puede producir pérdidas en su capacidad adquisitiva. La cobertura de los desempleados ha pasado en tres años de cobrarla algo menos del 80% al 60%. Y el informe repasa la reducción en los presupuestos de sanidad, educación, vivienda, y dependencia. En resumen dice: «la tendencia de la sociedad española desde esta perspectiva podría resumirse como de pobreza creciente y derechos menguantes».

El segundo capítulo -«La fractura social se ensancha»- es un avance de los resultados del VII Informe FOESSA sobre integración y necesidades sociales que se publicará en octubre. La exclusión se ha extendido y profundizado en los aspectos económico y político, la severa es superior a la de 2007. Existe un gran riesgo de que el aumento progresivo de la desigualdad, en el largo plazo, se convierta en crónico, por lo que recomienda -aquí Montoro no se ha dado por aludido- que la próxima reforma fiscal contenga los mecanismos suficientes para hacer retroceder la desigualdad actual.

Hay una constatación destacable en la investigación de Cáritas, mientras la exclusión ha empeorado en los indicadores económicos y políticos, por el contrario ha mejorado en el ámbito social: Las relaciones entre la ciudadanía, internas en las familias y las relaciones vecinales han mejorado, y las situaciones de aislamiento se han reducido. «En esta lección de convivir con la crisis se encuentra el germen en el que apoyar una verdadera recuperación. Es una oportunidad que no debemos desaprovechar». Es un aspecto realmente importante, y lo es a pesar de los gobiernos y montoros que en el mundo han sido.

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