Una de las cosas que estamos adoptando sin darnos cuenta es una nueva forma de interactuar con la televisión. Sin casi notarlo, empezamos a influirnos mutuamente los programas de televisión y nosotros mediante nuestros teléfonos inteligentes. Es cierto que antes también lo hacíamos, que enviabamos mensajes de texto a los programas de televisión para votar o para acceder a algún concurso, pero ahora lo hacemos de una forma más social.

Casi todos los programas hacen especial hicanpié en Twitter, la red social que lleva la visceralidad a su máxima expresión. Podemos opinar, votar, polemizar y definir secciones de los programas de televisión. Pero además de todo esto hay algo que no nos daban los mensajes de texto y no es otra cosa que la conversación e interacción que se genera entre los televidentes.

Muchas veces es más divertido seguir las conversaciones de Twitter sobre un programa que el programa en sí, por eso ya se están empezando a plantear muchos programas de televisión en el extranjero lo de sacar en pantalla todos esos comentarios. Así la televisión es interactiva en tiempo real y el contenido mucho más potente, ya que se puede ampliar la informacióny los puntos de vista. Las marcas de ropa ya tienen en el second-screen (segunda pantalla) otra fuente más de ventas.

Un claro ejemplo de como está cambiando el medio, es la web El Armario de La Tele, que permite adquirir la ropa que utilizan los presentadores de televisión o los protagonistas de series. Genial idea que facilita abrir un canal más de negocio, con un gran potencial. Un negocio muy lucrativo, pero que con la llegada de las nuevas tecnologías puede serlo aún más.

La aplicación Shazam, que sirve para reconocer la música que estamos escuchando en nuestro entorno para después ponerla en un lista de reproducción y comprarla, está trabajando en una nueva forma de interactuar con el telespectador. Pero qué pensarían ustedes si les informo de que la intención ahora es que con la ayuda de las productoras y los usuarios podemos saber qué ropa llevan los protagonistas de la serie o el programa que estamos viendo y así adquirir desde esa aplicación las prendas que nos gustan.

Este es un claro ejemplo, de como las ideas evolucionan de una forma insospechada. Tan solo hay que estar atento a la demanda del mercado y tener la capacidad de actuar de forma rápida.