Este año se rememora el XX aniversario de la muerte del compositor, intérprete, pianista, organista, clavicembalista, pedagogo y científico, nacido en Palma de Mallorca en 1909 y fallecido en Alicante en 1993, Jaume Mas i Porcel. Otra de las personalidades musicales más relevantes que ha dejado su impronta en nuestra capital, y que formó con su entrañable compañero también compositor, el insigne maestro alicantino Óscar Esplá, parte del claustro del profesorado en 1961 -mediante convocatoria de oposiciones a cátedras con un tribunal presidido por Esplá y Federico Mompou, entre otros- del Instituto Musical Óscar Esplá de la Caja de Ahorros del Sureste de España. Instituto -ubicado en la calle San Fernando- en el que sería designado un año antes el Maestro Esplá director, y acto seguido catedrático de composición, al lado de Mas Porcel que asumiría la cátedra de piano, aparte de la de composición y acompañamiento.

Con tal motivo de esta efemérides, la Obra Social Caja Mediterráneo le rinde un merecido homenaje en el que además de dar a conocer su inestimable legado transmitido a sus generaciones de discípulos y estudiosos de su obra y figura, y que fue donado a la entidad por el mismo Jaume Mas i Porcel, celebró días atrás en el Aula de Cultura de la CAM una mesa redonda en torno a su contribución musical, de la que fue moderador el gestor del Centro de Investigación de Legados y Donaciones de esta distinguida entidad, José Payá Bernabé, y participaron alumnos del homenajeado: los profesores de piano del Conservatorio Superior de Música Óscar Esplá, Margarita Sitges Soler, Ana María Flori López y Ángel Ramón Martínez. A esta mesa redonda asistieron además alumnos y admiradores del querido maestro, junto al director del Conservatorio Óscar Esplá, José Vicente Asensi Seva, y del Conservatorio Profesional José Tomás, Ángel Casero Alcañiz, y representantes de la entidad patrocinadora, el director honorario de la Obra Social, D. Manuel Sánchez Monllor, la gestora del Aula de Cultura, Magdalena Rigual, y la gestora de la Biblioteca humanística Gabriel Miró -en donde está depositado este centro de legados que de igual manera atesora el legado de Óscar Esplá-, Yolanda de San Rafael Sánchez Mateo.

Fue iniciada por la profesora Margarita Sitges, la cual pronunció unas palabras afectuosas y llenas de admiración hacia su profesor por su genialidad, del que destacó su extraordinaria personalidad humana y musical, conociendo antes al primer director del Instituto Musical del Sureste, Ricardo Ruiz Baquero, y después a Mas i Porcel, cuando anunció éste último las oposiciones a cátedra del instituto; siendo alumna de piano de José Torregrosa, a la vez que del maestro Mas Porcel, y de quien afirmó que "él me enseñó a enseñar" y recordó que fue intérprete de su obra pianística más conocida denominada Los Meteoros. También nos refirió la profesora Sitges que ella misma se interesaría por la obra del compositor Óscar Esplá quien escuchó su ejecución de la Pájara Pinta, basada en juegos infantiles.

Le secundó alternándose la así mismo profesora del Conservatorio Óscar Esplá, concertista de piano y musicóloga, la cual se ha preocupado por la promoción y estudio de la obra y figura del maestro Mas Porcel investigando su legado y ha participado en otra mesa redonda a él dedicada en Alicante en el año 2009 al acaecer el centenario de su nacimiento, Ana María Flori, quien subrayó la vinculación de su profesor de piano y clave al entonces Instituto Musical Óscar Ésplá y posterior Conservatorio Superior, al ser nombrado Mas i Porcel -recién llegado de efectuar una gira de conciertos por Francia, Austria, Italia- catedrático de piano por Óscar Esplá, desarrollando su magisterio dentro de las 37 plazas de esta disciplina, solfeo, armonía, baile y otras. La profesora Flori alentó al reconocimiento a "la gran persona, gran profesor, gran amigo" y reivindicó el instaurar los concursos de interpretación que dejó por escrito en su testamento, al igual que a la recuperación de su instrumento, el clave, actualmente conservado en Valldemosa por Miquel Estelrich, autor como intérprete de la grabación de un CD con las obras del compositor. En cuanto a su formación, señaló esta profesora que Mas Porcel estudió en París -lo mismo que su otro maestro de piano José Figueroa-, recibiendo muchos consejos de Falla del que hizo un arreglo de sus Noches en los jardines de España. El profesor Mas Porcel le enseñó la música antigua, romántica -a través de sus detallados análisis de la obra de Chopin- e impresionista, teniendo afinidad con compositores contemporáneos como el catalán Mompou y el húngaro Béla Bartok del que era especialista. Por último, recalcó Flori un sesgo muy significativo de su maestro: su sensibilidad, que le irradió interpretando ella sus propias obras al piano, y propuso que sería importante rescatar su producción orquestal entre la que sobresale la composición Homenaje a Ravel para piano y orquesta.

El tercer ponente, el profesor Ángel Ramón Martínez, director del Conservatorio Superior de Danza, coincidió con Flori, recibiendo de su profesor Mas Porcel -de quien aseveró que "sentó cátedra, al ser el primer catedrático de clave en España y como discípulo de la incomparable Wanda Landowska en París"- toda una lección de pedagogía musical en la que transmitía su amor a la música antigua, su poder interpretativo unido a su estudio de la ornamentación, y nos reveló casi como anécdota que tenía una disposición para tocar el piano y otra distinta para el clave o clavicémbalo, llevando a cabo grabaciones conjuntas -maestro y discípulo- de sus interpretaciones para ser difundidas por la emisora de conciertos de Radio Nacional de España.

A Mas i Porcel le fue concedida en 1983 la Gran Cruz de Alfonso X el Sabio, y se hizo merecedor del Gran Premio de la Academia Sueca.

Personalmente tuve el gran honor de conocerlo en su calidad de profesor al impartirnos en febrero de 1984 en el Conservatorio Óscar Esplá un curso sobre Acústica Musical, pues era un experto acústico y matemático en su condición de investigador de las cualidades físicas del sonido musical, como lo sería Esplá, de quien llegó a interpretar un año después de la denominación del Instituto musical con su nombre y dentro de su sala de conciertos las piezas pianísticas Canción de cuna y Antaño.

Emiliano García Alcázar es investigador del Legado Oscar Esplá.