Hace poco, en "Los Cafés del Meliá", - tertulia integrada por gente cuyo denominador común es su amor a Benidorm y a la que cada semana un personaje relevante nos visita - asistieron como invitados el matrimonio formado por Mª José Prendes, actriz y cantante; hija del fallecido, ilustre actor y vecino Luis Prendes, y su marido, un genio de la música a quien toda la profesión conoce por su nombre artístico: Eddy Guerin. A esta pareja, porque se lo merece, dedicaremos otro día más espacio. Pero hoy deseo que conozcan la percepción que tienen sobre el lugar donde siempre que podían nos visitaban y que ahora - hace ya nueve años - es su lugar de residencia.

Sintetizando, comentaron que a la ciudad que aman le faltan tres cosas: mayor actividad cultural; escena urbana renovada y una promoción acorde con la importancia de la ociourbe turístico-costera más importante de España y posiblemente de Europa.

Refiriéndose a esto último, consideraron que es escasa la información que damos para captar nuevos clientes. Y nos explicaron la cantidad de argumentos que a lo largo de los años tenían que dar a sus amigos para convencerlos de que aquí se vive y disfruta más que en cualquier otro destino de sol y playa. Aunque lo curioso, y positivo del caso, es que todos ellos han cambiado sus opiniones: "¿Que vais a pasar las vacaciones en Benidorm?" o "No me digáis que pretendéis residir allí para siempre", por estas otras: "Qué razón teníais, en cuanto podamos, queremos volver a Benidorm".

Sinceramente, a mí esta "anécdota", con otros personajes, me viene de lejos. Un importante ejecutivo bancario, residente en Madrid y que en cuanto puede viene con la familia, me decía: "Pero porqué no hacéis más publicidad; siento decirte que Benidorm tiene fama de hortera". Y como la pareja anterior, agregó: "A mis amigos me cuesta hacerles entender que aquí tienen todo tipo de ambientes y que es una maravilla de ciudad; ahora eso sí, una vez que la conocen, todos ellos me dan las gracias y vuelven y vuelven".

Queda claro que habrá que esforzarse más y poner en marcha imaginación, iniciativa y nuevas ideas. Aprovechemos nuestra condición de "ciudad-producto"; y escudándonos en lo primero, hagamos mucha publicidad indirecta, viral, encubierta y "conversacional": las más baratas y efectivas.

Ah, debo añadir que a esta reunión de amigos asistió otro contertulio de lujo: nuestro querido y admirado Manolo Escobar, a quien acompañaba su fiel e inseparable sobrino, manager y productor, Gabriel García Mármol. Y es que Eddy ha colaborado como arreglista, pianista y director musical, nada menos que en diecisiete de sus discos. Según nuestro insigne artista, los mejores de su carrera.