El pacto de gobierno entre CiU y ERC, firmado con el objetivo de organizar una consulta soberanista en 2014, dibuja un escenario que muchos no vieron, tras la caída de 12 escaños de CiU el pasado 25 de noviembre: el de una confrontación dura entre el Gobierno central y el Ejecutivo de una zona que supone el 19% del PIB.

Un Artur Mas en posición de debilidad ha optado por la "huida hacia delante", en lo que promete ser un gobierno inestable, mientras abandona a las clases medias y se envuelve en la bandera independentista para tapar intereses turbios. Esta es la lectura que se hace desde fuera de Cataluña y que comparten dirigentes de Unió (reacios a pactar con ERC) y buena parte de los empresarios catalanes (que siguen, para desesperación de La Moncloa, sin hablar claramente en contra de Mas y Junqueras).

Ocurre que esa no es la visión dominante en Barcelona. Se achaca a Mas su "irresponsabilidad" por abandonar a las clases medias, pero ha sido el empobrecimiento de estas ante una crisis inacabable (vía recortes en el bienestar, despidos o bajadas de sueldo) lo que ha abocado a parte de ella a seguir con la apuesta independentista (no pocos funcionarios dejaron de votar a Mas por los recortesÉ para pasarse a ERC, no al PP ni al PSC). Si, además, coincide en el tiempo con apuestas como la del ministro de Educación (percibidas en Cataluña como un ataque a la inmersión lingüística), no es extraño que "gente de orden" se plantee la insumisión (como el no acatamiento a la ley de Wert, como ya proponen por carta, enviada a los padres, algunas escuelas catalanas).

Empieza un período en el que el Gobierno tratará de impedir la consulta soberanista, mientras la Generalitat inicia una escalada de insumisión e incumplimiento del déficit, lo que acercaría a España a un rescate total. De momento, los trenes avanzan hacia el choque.

Cómo lo ven. The Daily Telegraph apuntaba la preocupación existente en la diplomacia estadounidense ante la posibilidad de que el Reino Unido abandone la UE. Aunque el primer ministro británico, David Cameron, ya ha afirmado que no se imagina a su país fuera de Europa, altos cargos de la secretaría de Estado de EE UU insistían en la necesidad de que Gran Bretaña siguiera en la UE, como enlace norteamericano para influir en el Viejo Continente (especialmente, en materias como la política exterior y el libre comercio).

Die Presse señalaba un estado de opinión consolidado en países de habla germana, como Austria o Alemania: según un estudio sociológico, más del 65% de adultos austríacos menores de 40 años (un 63%, en el caso de los alemanes del Oeste) se muestran de acuerdo con la frase "un niño pequeño sufrirá por el hecho de que su madre trabaje". Por otra parte, la profesión y los amigos son cada vez más importantes que los hijos como fuente de plenitud.

Cómo nos ven. The New York Times resaltaba una tendencia por la que deben pasar bastantes trabajadores españoles: continuar en su empleo pese a no recibir salario alguno. Así, si la empresa X entra en problemas financieros y empiezan los impagos de nóminas, la reacción de los empleados es la de seguir en su puesto (por miedo a perder el derecho de cobro de los pagos atrasados). Así se explica la acumulación de solicitudes en el FOGASA, fondo encargado de pagar salarios e indemnizaciones si la empresa quebrada no los cubre.

RTS, la televisión pública de Suiza, ha preparado un reportaje para su emisión en aquel país sobre la ciudad de Santander, como ejemplo de smart city (o ciudad inteligente). Según los responsables municipales, la apuesta por la innovación (a través de servicios como la información en paneles de las plazas de parking libres en superficie, por ejemplo) contribuye a situar a la ciudad cantábrica a la cabeza de las urbes emprendedoras del continente.

Qué se cuece. Clases de Periodismo se fijaba en el trabajo de Content Fleet, una empresa de análisis de datos alemana, creada en 2010: desde el pasado mes de mayo (y a partir de una base de datos de cinco millones de personas y del monitoreo de 600.000 webs), asesoran a editores de prensa (por 1.500 dólares mensuales) sobre cuales son los temas más atractivos para los internautas (y que, por tanto, pueden ayudar a los periodistas a atraer más lectores a sus diarios digitales).

media-tics se hacía eco de las declaraciones de Terry Kroeger, jefe de la división de diarios del inversor Warren Buffet: los periódicos de su grupo (hasta 80) se centrarán en ofrecer la mejor información urgente y local a sus lectores. Por ello, creará muros de pago en algunos de ellos (como en el exitoso World-Herald), mientras se apostará por promocionar (y comprar) periódicos pequeños, que no deban competir con otros rotativos de proximidad.