El anteproyecto de ley Orgánica para la Mejora de la Calidad Educativa (LOMCE) parece que en lugar de tranquilizar el futuro de la educación viene a aumentar incertidumbres que disparan los temores sobre la estabilidad del sistema y los planes de estudio. Desde una perspectiva profesional quisiera hacer unas pequeñas aportaciones a las cuestiones planteadas en el anteproyecto.

?1. Aumento de las horas lectivas de Lengua, Matemáticas y Ciencias. Modificaciones en el curriculum ESO. Pretender que el sistema educativo mejore porque aumenten en Secundaria las horas lectivas de unas asignaturas (Lengua, Matemáticas y Ciencias) en perjuicio de otras (Tecnología, Educación Plástica o Ética) es cuanto menos ingenuo si no cambiamos el planteamiento metodológico y nos limitamos ofrecer más" pero no "mejor".

Debemos ser más eficientes como profesores para, en las mismas horas lectivas, obtener mejores resultados, no se trata de que enseñemos más Lengua Castellana o más Matemáticas sino que los alumnos adquieran mejores competencias: competencia en comunicación lingüística, competencia matemática o competencia social y ciudadana.

El trabajo coordinado de las distintas áreas de conocimiento en competencias básicas puede mejorar la competencia lingüística del alumno desde el área de Ciencias Sociales y su competencia matemática desde el área de Tecnología. ¿Dónde se recoge en el anteproyecto de ley la necesidad de coordinar los equipos docentes de Secundaria para trabajar en equipo? Sin un trabajo coordinado de los equipos docentes el curriculum de ESO será un conjunto de compartimentos estancos donde primen los intereses departamentales (de asignatura) frente a las necesidades reales (de grupo docente).

El trabajo en competencias básicas da sentido al equipo docente, el trabajo por asignaturas refuerza el individualismo del profesor y ante los ojos del alumno los contenidos educativos se ofrecen fragmentados, sin conexión entre sí, alejados de la complejidad con que se muestran en la vida real.

Si se quiere reforzar el trabajo coordinado en competencias comunicativas sería imprescindible el tratamiento integrado de las lenguas y en el tratamiento integrado de lenguas y contenidos. Además habría que tender hacia propuestas curriculares globalizadoras que integren los contenidos de más de una asignatura y que los aborden con metodologías activas como el trabajo por proyectos.

Si queremos preparar a los alumnos para el mundo en el que van a vivir, el dominio de la competencia digital es imprescindible y el aumento de la ratio a 36 alumnos por clase en Secundaria impide esta labor, por lo que más que anticipar el futuro parece que regresamos al pasado.

Si se pretende mejorar el curriculum de 1º y 2º de ESO podría considerarse disminuir la carga lectiva de Religión-Historia y Cultura de las Religiones-Atención Educativa, de 2 horas semanales en 1º ESO y 2 horas en 2º ESO a una hora semanal en 2º ESO, con lo que quedarían 3 horas semanales para aumentar horas lectivas de tareas interdepartamentales ¿por qué no introducir de manera temprana el Trabajo Monográfico de Investigación en 1º y 2º ESO?

Si se quiere convertir el 4º de ESO en un curso realmente orientador, por qué no mantener las asignaturas comunes y, luego, elegir 2 troncales orientadoras con una carga horaria de 4 horas y una optativa de 2 horas.

4º ESO: Orientación Científica-Tecnológica: Física y Química y Tecnología o Biología y Geología.

4º ESO: Orientación Humanidades y Ciencias Sociales: Economía y Cultura Clásica: Latín.

4º ESO: Orientación Formación Profesional: Formación y Orientación Laboral e Informática.

Este último curso orientador, con sus tres opciones, debería ofrecerse obligatoriamente en todos los centros públicos y concertados para no crear una red dual donde la orientación profesional sólo sea ofrecida por los centros públicos.

?2 . Pruebas diagnósticas a final de etapa. Las pruebas objetivas externas al final de la etapas Primaria, Secundaria y Bachillerato no son ni buenos ni malos instrumentos de evaluación, lo importante será el uso que se haga de ellas. Las pruebas diagnósticas deben servir para corregir las deficiencias detectadas, si se convierten en un instrumento para elaborar un ranking de centros, entonces pueden ahorrarse el esfuerzo. La evaluación del alumnado, ¿se planteará en términos de dominio de conceptos, o de competencias básicas? Dime cómo vas a evaluar y así deberé preparar a mis alumnos.

El sistema educativo no debe pretender hacer del alumno un pequeño historiador, filólogo o científico, sino un gran ciudadano con amplias competencias y destrezas útiles para su vida. La respuesta está nuevamente en la metodología y en el despliegue del trabajo en competencias básicas.

Por último hay que destacar de la nueva ley la falta de consenso que suscita una vez más entre los partidos políticos, lo que significa que, antes de entrar en vigor, ya tiene fecha de caducidad en el próximo cambio de gobierno. Creo que nuestros hijos merecen algo mejor, los políticos son elegidos para resolver problemas, no para crearlos, así que, por favor, pónganse de acuerdo en una ley que dé estabilidad al sistema educativo.

Si de verdad queremos mejorar la educación y la formación de nuestros jóvenes, no estamos para perder el tiempo. Mi reconocimiento como Jefe de Estudios a la labor de los profesores que al margen de las dificultades, leyes educativas y burocracia caprichosa sigue innovando, trabajando, formándose, experimentando e intercambiando experiencias porque creen en su trabajo y en el futuro de sus alumnos.

¿Queremos empezar a cambiar nuestro modelo productivo desde la educación? ¿O lo apostamos todo al modelo de Eurovegas? No sé si quiero conocer la respuesta.