La derecha es la derecha, y como si fuera una cuestión de genes, no puede evitarlo. Por mucho que nos vendan las medidas como inevitables, es falso que sean las únicas posibles. Igual que otros países han adoptado otras medidas, aquí podía haberse hecho también. Nadie cuestiona el objetivo de reducir el déficit, pero hay algunas otras formas de conseguirlo.
¿Por qué el ilustre Montoro no da un margen de un año más a las comunidades? Fácil: porque así el recorte de las comunidades recae, más aún, sobre sanidad, educación, dependencia y servicios sociales. Sobre los pilares del Estado del Bienestar.
¿Por qué la Administración del Estado no se aplica la parte correspondiente de su propia medicina? Tendría que reducir los ministerios de Educación, o Sanidad, cuyas competencias están en su gran mayoría transferidas a las comunidades, quitar cargos y funcionarios en esos ministerios, y la propia desaparición de los ministerios.
¿Por qué hablan de reducir cargos públicos electos, concejales y diputados? La reducción de estos cargos supone modificaciones de leyes orgánicas lo que necesitaría muchos meses de tramitación; significaría menguar o desaparecer la representación de los minoritarios, y un empobrecimiento de la democracia. Es mucho más fácil, y no lo hacen, reducir los cargos de libre designación y de confianza de las administraciones, limitar los sueldos equiparándolos a las categorías profesionales de la Administración. Los funcionarios de empleo, de confianza política, cobran tanto como los de carrera con mayor titulación, y son más numerosos, mucho más, que los concejales y diputados. Su reducción a cifras razonables puede suponer un 5% de las nóminas públicas. En el Ayuntamiento de Madrid por ejemplo, son 254, y en Alicante superan el medio centenar.
¿Por qué la prórroga de la vida útil de las centrales nucleares, cuya inversión está más que amortizada, permite que el Estado francés se lleve la mitad de los beneficios como impuestos, y aquí se prorroga gratis mientras se quita la subvención a los mineros, de un acuerdo ya firmado, y ratificado por la Unión Europea? ¿Por qué sigue aumentando la deuda tarifaria con las eléctricas y no se vigila el sistema por el que se establece el "precio de mercado" de la energía? Mira que si nos están haciendo como la banca -el Barclays y otros- con el líbor y el euribor.
¿Por qué se recortan las retribuciones y la seguridad social de los cuidadores de las personas dependientes? ¿Quitar un 10% a los parados es incentivarlos? ¿Por qué se recortan los 86 millones del plan concertado de servicios sociales en un 40%, obligando a que recorten su parte comunidades autónomas y ayuntamientos? ¿Por qué se recortan las ayudas de los que están por abajo del nivel de pobreza, las que le permite pagar un recibo de la luz o del agua o de alquiler para que no les corten el servicio? Y sin embargo: ¿por qué no se establece el impuesto sobre las grandes fortunas? ¿Por qué no se restablece el de transmisiones patrimoniales? ¿Por qué se amnistía a los defraudadores fiscales, en lugar de intensificar la inspección?
El Gobierno está haciendo recaer conscientemente los recortes sobre las clases medias y los sectores más débiles de la sociedad, los que tienen menos capacidad de influencia sobre el Gobierno. Se siente fuerte con los débiles y es extraordinariamente servil con los fuertes. El miedo paraliza a la gente un tiempo, pero también cuando se rompe el bloqueo se manifiesta en forma abrupta y violenta.
La destrucción o reducción a límites ridículos del Estado del Bienestar supone la pérdida de legitimidad del Estado democrático. La legitimidad desde la postguerra no se basa sólo en la elección democrática; sino en la paz social que suponía el reparto de rentas del Estado del Bienestar; socialmente una alianza entre los trabajadores y las clases medias. La actuación del Gobierno de Rajoy le deslegitima y en esas condiciones puede llegar el momento en que los "mercados" preferirán un gobierno técnico y tenemos los precedentes de Italia y Grecia. Rajoy se está buscando su relevo sin pasar por las urnas. No les servirá ni a ellos. Lamentable.
