La campaña empezará exactamente el próximo lunes en el debate en el que Rajoy seguirá sin decir nada y Rubalcaba tendrá que ser Rubalcaba para intentar movilizar a los 2 millones y medio de indecisos suyos que pueden dejar al PP sin la mayoría absoluta. También será determinante el resultado de la reunión del G20. La crisis está arrasando y una asfixiante nebulosa Blade Runner cubre a toda velocidad el planeta. La gente, en todo el mundo quiere cambio, y Rajoy sólo ofrece el silencio del abismo. El movimiento 15M ha sido incapaz de traducir toda su energía en democracia representativa. Entre nosotros, Alberto Fabra se juega su consolidación y Jorge Alarte su desaparición. Leyre Pajín tendrá que elegir entre Madrid y la nostra pàtria valenciana y Federico Trillo, triunfante, después de haberse desecho, sin despeinarse, de Paco Camps, está, como siempre, a lo suyo, en el negocio, la trastienda, en el trajín de la justicia popular. Trabajo no le va a faltar. Y menos en Alicante. Sonia Castedo tiene un hermano. Viva Honduras. Viva el semen español.
