Me han contado que el Sr. Camps, si gana las elecciones y aprovechando las excelentes relaciones que mantiene con la Santa Madre Iglesia, adaptará y aprobarán el Catecismo Napoleónico de 1807. Vean que bonito quedará: Los cristianos debemos a Don Francisco Camps, nuestro presidente: amor, respeto, obediencia, lealtad y los impuestos ordenados para la preservación y defensa de nuestra Comunidad y de su Presidencia; también le debemos nuestras fervientes oraciones para su seguridad y para la prosperidad espiritual y secular de la Comunidad Valenciana.
Dios que crea los imperios y los reparte conforme a su voluntad, le ha establecido como nuestro presidente y le ha nombrado representante de su poder. Así que el honrar y servir a nuestro presidente es honrar y servir al mismo Dios y quienes se resistan al orden establecido se hacen merecedores de la condenación eterna. Doscientos años después y simplemente cambiando los nombres, nuestra realidad queda fielmente reflejada en este decimonónico catecismo, no es exageración, simplemente hay que recordar como el PP en la legislatura recién finalizada ha enviado al infierno a los infieles.
Por cierto ¿han visto las vallas de publicidad del Partido Popular? El fotógrafo de Camps es del PSOE, seguro.
