Vivimos a caballo entre la era digital y la analógica. Ya sólo una pequeña parte de la sociedad se mantiene al margen de la gran revolución que suponen las nuevas tecnologías. Hasta los más mayores empiezan a manejar el correo electrónico e internet con gran soltura.

La sociedad de la información nos invade de forma inexorable y ya nada es como era. Ni la compra de unas vacaciones, ni la lectura de los periódicos, ni la búsqueda de una vivienda... ni siquiera las campañas electorales quedan ajenas a su poder.

Dicen que Barak Obama debe su victoria, en gran medida, al excelente trabajo que hicieron sus equipos en las redes sociales y en Internet. Yes, we can. Sinceramente, no creo que ésta fuera la razón de su victoria, pero sí ayudó de forma decisiva a conseguirla. A extender y multiplicar los efectos de su esperanzador mensaje.

Las redes sociales hacen al candidato más cercano al ciudadano y su proyecto político objeto de análisis por parte del mismo. Éstas te permiten conocer, de primera mano, a quién vas a votar, cuál es su currículum, cómo piensa y cómo opina. Internet hace que nuestra democracia sea mucho más transparente y participativa.

Hasta ahora se notaba una cierta resistencia a volcarse en Internet para planificar una campaña electoral. Internet es un entorno cuya visibilidad y control están al alcance de cualquiera y cuya repercusión puede ser total, si los medios de comunicación tradicionales se hacen eco de nuestra actividad en la red.

Las redes sociales (Facebook, Twitter, Linkedin, Yahoo, El Blog del candidato, etcétera) nos obligan a trabajar mucho más, porque debemos plasmar en ellas nuestra labor, nuestras propuestas y nuestra vida en general para mejor conocimiento de los electores. Las redes sociales, además de un lugar de convivencia y relación propiamente dicho, son un medio de comunicación de potentísima magnitud. Una tribuna desde la cual podemos ser interpelados en tiempo real por cualquier ciudadano.

Ahora desde el PPCV nos hemos propuesto aprovechar al máximo las posibilidades que nos proporcionan las nuevas tecnologías con varios objetivos muy importantes: racionalizar y economizar los costes de la campaña (lo que resulta casi una obligación en una situación de crisis como la que sufre ahora nuestro país) y además, aprovechar la redes sociales para acercarnos al máximo a nuestros electores, tanto para aquellos que quieran conocer a fondo nuestro programa electoral y candidatos, como para aquellos que quieran participar más activamente realizando sus propuestas y enviándonos sus ideas.

Queremos hacer una campaña donde la imaginación, la austeridad y la participación de todos, sea el común denominador y trasladar al ciudadano que, con nuestra forma de administrar lo público, se puede disfrutar de una gestión trasparente y eficaz.

Todo eso es posible con el PP porque así lo demuestra, día a día, nuestro president Camps. Ahora somos una autonomía fuerte, respetada, pujante y con una proyección y prestigio internacional incuestionables. Ese es el mensaje que vamos a trasladar a los ciudadanos en esta campaña electoral que ahora comenzamos, la de las autonómicas y municipales de la nueva era. La era de Internet 2.0. Ahora más que nunca: Yes, we Camps.