La pujanza de la mujer en España se va viendo poco a poco reflejada en la vida pública. Nadie se sorprende ya porque aparezcan en puestos directivos y resulta normal que encabecen la lista de un partido o gobiernen una institución. Esto poco tiene que ver con la tonta ley de paridad del PSOE, que lo único que logra es poner bajo sospecha el mérito ante la duda de si se debe a la capacidad o a la cuota.

En Orihuela nos gobierna una dama inteligente e inquieta y aspira a gobernar una señora intelectualmente sólida y rigurosa. Y a eso deseo referirme. Las últimas apariciones de Antonia Moreno nos muestran una política madura, que ha aprendido el oficio rápidamente, con ilusión y proyecto. Es la primera vez en mucho tiempo que el PSOE tiene un candidato creíble y no debería perder esta oportunidad. Es una buena noticia para el municipio.

Que gane o no el Partido Popular las próximas elecciones no es la cuestión principal, lo urgente es que los ciudadanos contemplemos la posibilidad de que un cambio es posible. Lo mejor de cada uno sale por contraste u oposición con los otros. Nadal es más grande por la necesidad de vencer a Federer. Si nos creemos que Antonia es la alternativa y que esta es viable las posibilidades de que el gobierno mejore y sus listas ganen peso específico crecen, lo que al fin y al cabo beneficiará a nuestro descuidado pueblo.

Antonia está en sazón política, resulta creíble y comprometida, tiene un plan y ha limado algunas asperezas de trato, aunque no del todo, posee discurso y razones. Confiemos que su partido no le impida ampliar la base social y la cuota de votantes donde pescar. Le preocupan los grupitos que puedan dividir el voto a última hora. No sé los demás, yo no contribuiré a ello.

Reconozcamos que la alcaldía ahora solo la pueden disputar las dos grandes marcas y que debe ser así, lo cual no es óbice para que otras opciones consolidadas mantengan su presencia ocupando espacios políticos concretos, pero hemos de rogar porque los partidos en liza no sean muchos más de los que hoy pueblan la esquina del pavo.

Y los vecinos deben ser capaces de distinguir entre comicios locales, regionales y nacionales. José Luis Rodríguez Zapatero no puede penalizar a Antonia si ha hecho una buena oposición. En general ha mantenido una posición institucional, no ha derrapado por la demagogia ni se ha dado al populismo. En muchos casos sus iniciativas han sido creativas, necesarias y convenientes, sin olvidar la dificilísima labor de fiscalización, especialmente peliaguda en este ayuntamiento.

Tiene concejales verdaderamente valiosos como Carlos Bascuñana, por el que siento debilidad, al igual que me ocurre con Manuel Culiáñez. Ana Mas es una gran escolta, pero debería rebajar su carga ideológica algo trasnochada y demasiado sectaria; a veces el exceso de algo (inteligencia, cultura) puede perjudicarnos si no se maneja con habilidad y obcecarnos en lo accesorio.

Si en algo he de reconocer el mérito de esta mujer por encima del resto es en su cruzada contra Fenoll, lástima que algunos compañeros se dediquen a chafarle la guitarra con visitas extemporáneas, restando crédito a las denuncias que hace y dando legitimidad a un modo de comportarse que hace palidecer a los Fabra o pretorianos. Cuánto caparra tienes por compañero y que asco dan.

En fin que ánimo y que gane la mejorÉpara Orihuela.