El pamplonés Sergio Fernández, subcampeón de Europa de 400 metros vallas, borró hoy de las listas el récord más viejo de España con un tiempo de 48.87 en la primera semifinal olímpica, aunque no pudo meterse en la final, a la que accedían los dos primeros y dos más por tiempos.

El récord de España, el más antiguo de las listas nacionales (masculinas y femeninas), estaba a punto de cumplir 29 años en poder de José Alonso Valero con una marca de 49.00 conseguida el 31 de agosto de 1987 en las semifinales de los Mundiales de Roma.

Con el tercer puesto de su serie, el español permaneció unos minutos a la espera de si le correspondía una de las dos plazas de repesca, pero ya en la segunda serie el tercero y el cuarto hicieron mejor tiempo que el navarro.

El discípulo de Jesús Álvarez, que debutaba en unos Juegos Olímpicos, había superado la primera ronda con una marca de 49.31 que le dio una de las seis plazas de repesca por tiempos y en esta penúltima instancia, frente a rivales que habían bajado de 49 segundos este mismo año, el objetivo de la final era prácticamente irrealizable.

Como partía con la peor marca de los ocho le cupo en suerte la peor calle, la uno, con dos curvas cerradas en las que no es posible desplegar la velocidad punta y se pierde energía en contrarrestar la fuerza centrífuga. Pisar fuera del carril acarrea la descalificación.

Sin embargo, Fernández hizo una carrera casi perfecta, modulando el ritmo de principio a fin y sin cometer errores. En la recta se superó, batiendo a rivales que partían con marcas mucho mejores que la suya, que era de 49.02 hasta hoy.