El Pantano de Elche, declarado Bien de Interés Cultural de la Comunidad Valenciana es una zona de gran interés hidrológico y de elevada riqueza medioambiental por su embalse, los barrancos y cuencas, las acequias y sus pintorescos acueductos y, cómo no, la estrella indudable del área: la imponente presa de 23 metros de altura y 62 metros de radio medio de curva, construida sobre el río Vinalopó.

El embalse de Tibi es el más antiguo de Europa, pero el de Elche no se queda atrás, cuenta con la primera presa en arco que se construyó en Europa desde la antigua Roma. Los trabajos de construcción comenzaron en 1632, estando en actividad durante más de un siglo pero, en 1793, la presa quedó destruida por una enorme riada de agua y hasta 1843 no volvió a ponerse en funcionamiento; actualmente goza de un nivel bastante bueno de agua, sobre todo en los meses de invierno. Se trata de una de las pocas obras de esta magnitud en nuestra comunidad y que se ha ido transformando, con el paso del tiempo, en un paraje natural repleto de fauna y flora de especial protección.

La ruta para descubrir cada rincón de este pantano es fácil, no hay obstáculos ni puntos peligrosos, por lo que es perfecta para practicar senderismo y ciclismo tranquilamente, como si de un agradable paseo con estupendas vistas se tratara, y totalmente apta para ir con niños. Algunas cosas que podrás encontrarte a lo largo del recorrido son un antiguo puente y su mirador, el de los «Cinco Ojos», y un molino de agua, además de la propia presa. Asimismo, también podrás realizar una parada para reponer fuerzas en el merendero que hay en la zona.

Biodiversidad

El Proyecto Biodiversidad y Medio Ambiente del Pantano de Elche, llevado a cabo por la UMH está descubriendo numerosas especies que no constaban en sus alrededores. El último hallazgo ha sido una piara de jabalíes con diez pequeños rayones, sin dejar a un lado otros ejemplares como la ya asentada garza real, grajillas, pollos de malvasía cabeciblanca, cerceta pardilla, etc. Además, la laguna está rodeada por una de las mayores extensiones de carrizal de la Comunidad Valenciana y existen diversas plantas protegidas según el Catálogo Valenciano de Especies de Flora Amenazadas. En el área del pantano también se han encontrado restos íberos, romanos y medievales.

¿Cómo llegar?

Para llegar al pantano hay que seguir la autovía A70 desde Alicante a Elche, y a la altura del barrio de Carrús tomar la salida 518 para incorporarte a la carretera CV-84 en dirección Aspe. A continuación habrá dos rotondas en las que tendrás que seguir recto, y una tercera «semi rotonda» en la que deberás tomar la primera salida, en la que se indica el camino del pantano. Ya solo queda seguir recto hasta que tu vehículo «aguante» (ya que el camino se va complicando para acceder en coche), aparcar lo más cerca posible y... ¡a caminar!