L a presunta etarra Concepción Iglesias Álvarez, pareja del antiguo dirigente de ETA José Javier Arizkuren Ruiz «Kantauri», fue detenida ayer en Francia y puesta en libertad a las pocas horas por orden de la Fiscalía del Tribunal de Apelación de Pau. Concepción Iglesias estaba reclamada por España en relación con el intento de atentado al rey Juan Carlos en Palma de Mallorca en 1995 y seguirá en libertad a la espera de que la corte examine y se pronuncie sobre la orden de detención dictada por España.

La mujer fue arrestada por la Policía Judicial francesa a primera hora de la mañana cuando circulaba por una carretera, cerca de su domicilio, entre las localidades vascofrancesas de Urt y Lahonce, no lejos de Bayona. Iglesias Álvarez, que no estaba armada ni llevaba documentación falsa, no se resistió al arresto, precisaron las fuentes. La euro - orden española se basa en una antigua decisión de la Audiencia Nacional, que la procesó en rebeldía en relación con el intento de atentado contra el Rey. Iglesias Álvarez, detenida por primera vez en Francia en 2000, fue excarcelada a finales de 2004 tras cumplir una pena de prisión por este caso.

En mayo de 1995 supuestamente «Kantauri» puso en contacto en París a su pareja con tres etarras que iban a intentar asesinar al Rey en Palma de Mallorca. Cuando el 15 de julio de ese año la operación se puso en marcha y los tres terroristas zarparon del puerto francés de Antibes rumbo a la isla balear, Iglesias asumió las funciones de enlace entre el comando y el dirigente etarra «Kantauri».

Sin embargo, el 9 de agosto fueron detenidos en Palma de Mallorca los tres miembros del comando, que habían decidido atentar contra el Monarca el 13 de agosto, y Concepción Iglesias, que estaba embarazada, pasó a la clandestinidad. En el juicio en Francia, en el que ella negó su pertenencia a ETA, «Kantauri» reconoció su propia culpabilidad en el intento de atentado y negó que su pareja actuase de enlace con el comando que debía perpetrarlo.

La Ertzaintza identificó ayer como autores de la colocación de dos bombas en el Juzgado de Getxo (Vizcaya); el pasado día 11 a Jurdan Martitiegi Lizaso y Arkaitz Goikoetxea Basabe, a quien en septiembre ya se le atribuyó el atentado contra la casa cuartel de Durango (Vizcaya); en agosto. Martitiegi Lizaso, de 27 años y natural de Durango, destaca por su altura de casi dos metros y se encuentra huido desde hace aproximadamente un año. Este etarra fue detenido en dos ocasiones por la Policía vasca. Arkaitz Goikoetxea Basabe, de 27 años y natural de Barakaldo (Vizcaya);, se encuentra huido desde 2003, tras haber sido detenido en dos ocasiones por la Ertzaintza. El primer arresto fue el año 2000, cuando perdió varios dedos al explotarle un artefacto casero y fue detenido en un ataque a la Subdelegación del Gobierno en Vitoria, y el segundo en 2002, por un ataque al cuartel de la Guardia Civil en Galdakao.