La Mesa del Parlament ha decidido este martes no tramitar la reforma de la Ley de la Presidencia para investir a distancia a Carles Puigdemont (JxCat), y ha pedido un informe a los letrados sobre esto, según han explicado a Europa Press fuentes parlamentarias.

La decisión se ha tomado tras un acuerdo previo de ERC y JxCat --que tienen la mayoría en la Mesa-- y han aparcado así las diferencias que tuvieron la semana pasada sobre este tema.

La reforma, impulsada por JxCat, busca investir a Puigdemont presidente de la Generalitat sin que deba comparecer ante el pleno, lo que choca con la interlocutoria del Tribunal Constitucional (TC) sobre la investidura.

Las mismas fuentes detallan que, precisamente, se pregunta a los letrados qué posible afectación tendría tramitar esta ley, ante la interlocutoria del TC; y también se les pregunta qué posibles consecuencias acarrearía para los miembros de la Mesa que avalaran la tramitación.

La interlocutoria del TC avalaba la investidura de Puigdemont si cumplía con dos supuestos: que el candidato de JxCat estuviera en la Cámara, y que antes se presentara ante la justicia y obtuviera el permiso del juez.

Puigdemont no contempla regresar por ahora, y JxCat busca modificar la normativa para investir a su candidato aun estando en Bruselas: los letrados deberán "interpretar" si esto es compatible con lo dictado por el TC.

Además, JxCat había pedido que la modificación de la ley se tramitara con la máxima urgencia y que se aprobara en el pleno por lectura única --dos vías distintas--: ahora la Mesa también pregunta a los letrados si es posible o si deben elegir una de las dos vías.

Otras fuentes parlamentarias consultadas por Europa Press han explicado que los miembros de Cs en la Mesa, José María Espejo-Saavedra y Joan García, se han mostrado partidarios de que directamente se rechazara la admisión a trámite, sin mediar informe de los letrados.

La decisión de aplazar la tramitación se ha tomado tras una reunión de la Mesa de dos horas --una más de lo habitual-- y luego se ha reunido la Junta de Portavoces, sobre otros temas.

Superan las diferencias

Esta decisión se toma tras un acuerdo JxCat-ERC, después que hace justo una semana, el martes 13 de febrero, se enfrentaron públicamente por la decisión del presidente del Parlament de no incluir la tramitación de la ley en el orden del día de la Mesa de ese martes.

JxCat había presentado la ley en solitario y urgiendo a tramitarla, mientras que ERC recelaba de la reforma al considerar que abriría un nuevo contencioso con el TC que afectaría a los miembros independentistas en la Mesa.

En los siete días que han pasado, han llegado a un acuerdo que busca sintetizar las dos posiciones: ERC acepta tramitar una ley que en principio no quería, y JxCat acepta que los letrados expongan si esta tramitación supondría un nuevo choque con el TC.

La reforma que propone el grupo de Puigdemont quiere que el candidato a la Presidencia pueda "autorizar, por mayoría absoluta, la celebración del debate de investidura sin la presencia o sin la intervención" personal, pudiendo hacerlo por escrito o por cualquier otro medio previsto en el reglamento de la Cámara.

También pide añadir un apartado a la ley para que todos los órganos del Govern puedan "constituir, convocar, celebrar sus sesiones, adoptar acuerdos y remitir actas tanto de forma presencial como a distancia", lo que habilitaría a Puigdemont a dirigir el Ejecutivo desde Bélgica.