Los catalanes están llamados a las urnas el próximo domingo 1 de Octubre para votar en el referéndum por la independencia convocado por el Govern. La celebración de la consulta independentista está todavía en el aire, dadas las medidas adoptadas por la Fiscalía. Si, finalmente, el pueblo de Cataluña puede votar se abrirán dos escenarios políticos. Tal y como han avanzado los líderes catalanes, si gana el ´sí´ se pondrán en marcha los mecanismos recogidos en la Ley de Transitoriedad. Si, por el contrario, gana el ´no´ Puigdemont convocará elecciones autonómicas.

Pese a la incertidumbre sobre la celebración del referéndum el 1-O, el presidente de la Generalitat, Carles Puigdemont, lo tiene muy claro, "sólo aceptaremos una inhabilitación del Parlamento de Cataluña". Mientras esta no llegue, los independentistas siguen adelante con su convocatoria y aseguran que el lunes 2 de octubre "aplicaremos el resultado".

Si es así, los dirigentes de la Generalitat aseguran que en caso de que gane el ´sí´ en el referéndum pondrán en marcha los mecanismos recogidos en la Ley de Transitoriedad Jurídica y Fundacional. La bautizada como "ley de desconexión" define un corpus legal transitorio hasta la constitución oficial de una república catalana. En concreto, dicha ley apunta que "una vez celebrado el referéndum y en caso de resultado favorable de la opción independentista, la Generalitat activará un proceso constituyente, democrático, de base ciudadana, transversal, participativo y vinculante, para redactar y aprobar la Constitución de la República".

En caso de que el 1-O gane el ´no´ a la independencia, "el único escenario" que entra en los planes de Junts pel Sí y la CUP es la convocatoria de elecciones autonómicas en Cataluña. Así lo han adelantado los dirigentes catalanes promotores de la consulta. El propio Puigdemont ha asegurado que habría que escuchar al pueblo y, si éste no quiere la independencia, él mismo "no tardaría ni 24 horas" en convocar nuevos comicios.