La inesperada muerte por un disparo en el pecho del expresidente de Caja Madrid Miguel Blesa no impedirá que sus herederos tengan que asumir la responsabilidad civil y, por lo tanto, hacer frente a las posibles indemnizaciones, a no ser que renuncien a la herencia.

La muerte de una persona investigada extingue su responsabilidad penal, tal y como señala el Código Penal, no la civil que la primera pueda acarrear, por lo que si existiera dicha responsabilidad civil derivada de un delito, ésta pasa a los herederos del fallecido.

La Ley de Enjuiciamiento Criminal (LeCrim) establece que "la acción penal se extingue por la muerte del culpable, pero (..) subsiste la civil contra sus herederos y causahabientes".

Si el fallecido está inmerso en una causa que no ha llegado a juicio, en la fase de instrucción, y por tato no ha sido condenado, la muerte extingue la acción penal; si ocurre durante el trámite de un recurso y había sido absuelto, procede absolverle. Y si el condenado en sentencia firme fallece, la responsabilidad civil derivada del delito sí se transmite a sus herederos.

De los muchos frentes judiciales que Blesa tuvo abiertos, el más mediático fue el de las tarjetas opacas de Caja Madrid, por el que fue condenado a seis años de cárcel; la sentencia está recurrida ante el Supremo, y aunque el recurso del exbanquero cae de forma automática, sus herederos tienen la posibilidad de presentar otro.

El artículo 854 de la Ley de Enjuiciamiento Criminal señala que "podrán interponer recurso de casación el Ministerio fiscal, los que hayan sido parte en los juicios criminales, los que sin haberlo sido resulten condenados en la sentencia y los herederos de unos y otros".

En cuanto a las otras dos causas que aún tiene abiertas Blesa, los sobresueldos en Caja Madrid y las participaciones preferentes emitidas por la entidad, un juzgado de instrucción decretó en febrero la apertura de juicio oral por un delito de administración desleal continuada.

Por lo que respecta a la pieza sobre participaciones preferentes, el titular del juzgado central de instrucción n 4, Fernando Andreu, decidió en noviembre del año pasado reactivar la pieza, para aclarar si la antigua cúpula de Caja Madrid utilizó la emisión de deuda subordinada y/o participaciones preferentes para captar activos y disfrazar la situación de insolvencia.

En ambos casos, en los que hay otros imputados además de Blesa y que prosiguen su curso, los herederos del fallecido podrían tener que hacerse cargo de las indemnizaciones en el caso de que las hubiere, a no ser que renuncien a la herencia.