El juez de la Audiencia Nacional José de la Mata ha dejado sin efecto la detención judicial de Jorge Barrigón, dueño de Cat Helicopters, al que investiga en una pieza secreta del caso Pujol por blanquear 900.000 euros del primogénito de los hijos del expresidente catalán, han informado fuentes jurídicas.
El empresario ha comparecido ante el magistrado y ha quedado en libertad después de permanecer arrestado durante unas horas, coincidiendo con una serie de registros en su domicilio y en su compañía. La Policía sospecha que, a cambio de contratos irregulares de la Generalitat, Cat Helicopters se encargó de trasladar "en múltiples ocasiones" en helicóptero a los Pujol a Andorra.
De la Mata ordenó la detención de este empresario catalán por los presuntos delitos de blanqueo de capitales, falsedad documental y organización criminal. La información aportada por la Policía desmontaría la versión de Jorge Barrigón y Josep Pujol, que en una declaración ante la Agencia Tributaria aseguraron que los 900.000 euros aportados por el segundo fue un préstamo que realizó a este empresario.
Según consta en un informe de la UDEF aportado al sumario del 'caso Pujol', al que tuvo acceso Europa Press, Cat Helicopters "pudo ser beneficiaria de concursos públicos presuntamente irregulares por parte del Servei Català de Trànsit dependiente del Departamento de Interior de la Generalitat". Para ello, se cita como indicios la agenda de Josep Pujol intervenida en su domicilio de Barcelona.
También se hace referencia a la declaración de un denunciante, un empresario que fue socio del dueño de Cat Helicopters. Con este denunciante, Josep Pujol habría celebrado, según la Policía, un "préstamo ficticio para blanquear" 900.000 euros procedentes del patrimonio familiar del clan.
Este empresario advirtió durante su declaración ante la Brigada Central de Investigación de Blanqueo de Capitales y Anticorrupción, celebrada en octubre de 2016, de la existencia de "presuntas irregularidades" cometidas por el Departamento de Interior Catalán "como mínimo desde 2006", poco después de la incorporación de este testigo a la compañía.
Se habrían adjudicado a Cat Helicopters servicios en el ámbito forestal, especialmente durante las campañas de verano. La persona encargada dentro del Servei de redactar las condiciones técnicas necesarias que servían de base a los concursos públicos era el piloto Antonio Almerich, de quien el empresario tenía constancia que se le retribuía económicamente porque encontró "matrices de talonarios olvidados en un cajón" donde aparecían los pagos, que alcanzaban unos 4.160 euros mensuales desde la compañía de helicópteros.
El denunciante añadió que Barrigón siempre le decía que este concurso "sería siempre suyo" y que, de hecho, se lo adjudicaban sin problemas a pesar de que otras compañías mayores intentaban licitar y siempre perdían.
