La marcha lenta de los taxistas de Barcelona ha provocado importantes problemas de circulación en las vías que rodean la ciudad, como los diecisiete kilómetros de retenciones que se han producido entre el Nudo de la Trinidad y la Zona Franca y otros once kilómetros de retenciones en la Ronda de Dalt.

La "operación caracol" ha empezado a las 11.00 de la mañana en el Aeropuerto de El Prat y en ella han participado unos 5.000 taxistas, según los organizadores de la marcha, la Asociación Élite Taxi Barcelona, que denuncian que el Ayuntamiento de Barcelona no cumple con los compromisos adquiridos con este colectivo.

La protesta ha colapsado las Rondas de Barcelona y, según la web del Servicio Catalán de Tráfico (SCT), hay 17 kilómetros de circulación con congestión entre el Nudo de la Trinitat y la Zona Franca y otros once kilómetros de retenciones en la Ronda de Dalt.

El portavoz de la asociación que convoca la protesta, Élite Taxi Barcelona, Alberto Álvarez, ha dicho que el ayuntamiento está incumpliendo los acuerdos a los que llegaron con el colectivo el pasado verano.

Ha criticado que la Guardia Urbana no está formada en materia de transporte para que pueda sancionar a las empresas que incumplen la normativa y que no se respeta el carril bus.

La marcha lenta ha comenzado a las once de la mañana desde el aeropuerto de El Prat y los taxis con licencias par circulan por la Ronda de Dalt, mientras que los de licencia impar lo hacen por la Ronda del Litoral y, sin entrar en la ciudad, volverán al aeropuerto.

El objetivo de esta marcha lenta es "colapsar las rondas" y Álvarez ha advertido de que "esto es un aviso" y lo que puede llegar después "puede ser mucho más fuerte", como una importante movilización durante el Mobile World Congress, a partir del 27 de febrero.