El exsecretario general del PSOE Pedro Sánchez y algunos de sus diputados más afines, sólo han aplaudido al portavoz socialista en el Congreso, Antonio Hernando, al final de su discurso y apenas por unos instantes, a diferencia del resto del grupo parlamentario.

Durante toda la intervención de Hernando, Sánchez, César Luena o María González Veracruz, han permanecido en silencio y sin aplaudir a su compañero de bancada.

Tampoco la diputada Margarita Robles se ha sumado a los aplausos del resto del grupo parlamentario del PSOE durante esta intervención en la que Hernando ha explicado el viraje de posición de los socialistas del no a la abstención.

Ya al inicio de su discurso ha hecho Hernando una referencia a Sánchez cuando ha puesto en valor que se sometiese a un debate de investidura en la anterior legislatura.

Así, tras tachar de "irresponsable" que el líder del PP, Mariano Rajoy, declinase el ofrecimiento del rey de ser candidato, Antonio Hernando ha subrayado que Pedro Sánchez asumió, "de forma valiente y responsable", el encargo de Felipe VI y sí se sometió a la investidura en la anterior legislatura.

Mientras Hernando ha dicho estas palabras, Sánchez no levantaba la mirada y continuaba consultando su teléfono móvil.

Sólo ha sido hasta el final, al acabar el discurso y cuando todo el grupo parlamentario socialista se ha puesto en pie y ha roto en aplausos, cuando Sánchez se ha puesto en pie durante apenas unos segundos para reconocer el trabajo de Hernando.

Un gesto al que no se ha sumado sin embargo algunos de los diputados más afines al exsecretario general como Margarita Robles, César Luena, Susana Sumelzo, Sofía Hernanz o José Luis Ábalos, que han permanecido sentados, con gesto serio y sin aplaudir.