La decisión del Comité Federal del PSOE de abstenerse en la investidura de Mariano Rajoy deja vía libre a que, tras las consultas del Rey con los representantes de los partidos, que empezaron este lunes y finalizarán este martes, la presidenta del Congreso, Ana Pastor, convoque casi al límite del plazo posible la sesión que la hará posible.

El calendario para formalizar la investidura concluye el próximo 31 de octubre, justo dos meses después de la primera votación fallida a la que se sometió Rajoy para intentar revalidar la confianza del Congreso.

Al término de la ronda de contactos de este martes, el Rey tiene previsto comunicar a la presidenta del Congreso, Ana Pastor, si Rajoy es nuevamente candidato a la investidura a la vista del resultado de sus consultas.

Es a la presidenta del Congreso a quien corresponde fijar el calendario de la investidura, es decir, el día y la hora de comienzo del debate, con la vista puesta en el límite del lunes día 31, cuando vence el plazo para que se haya investido un presidente del Gobierno.

En caso de que Rajoy sea propuesto como candidato, se prevé que sean precisas dos votaciones para superar la investidura.

Pastor tiene que concretar cuándo se celebraría el pleno que concluiría con una primera votación, en la que se exige mayoría absoluta (al menos 176 diputados) y a las 48 horas de ésta, tendría lugar la segunda, en la que ya solo se requiere mayoría simple (más síes que noes).

El debate podría comenzar este mismo miércoles, lo que supondría que la primera votación tendría lugar el jueves y la segunda, en la que Rajoy saldría investido, el sábado.

Aunque también podría comenzar el jueves, lo que llevaría a una primera votación el viernes y a la segunda y definitiva el domingo 30, un día antes de que finalice el plazo.