Arnaldo Otegi ha ofrecido su primer mitin como tal en la fiesta organizada esta tarde en su localidad natal, Elgoibar, para celebrar su puesta en libertad tras seis años y medio de condena por intentar reconstruir Batasuna a las ordenes de ETA.

El acto, que ha sido seguido por unas 2.000 personas en la plaza principal de la localidad, ha contado con la presencia de la plana mayor de Sortu, con Pernando Barrena, Rufi Etxeberria y Joseba Permach a la cabeza, acompañados, como esta mañana en Logroño, por los dirigentes de la CUP David Fernández y Ana Gabriel.

También han acudido el exdiputado general de Gipuzkoa, Martín Garitano, la última candidata a lehendakari de EH Bildu, Laura Mintegi, y referentes históricos de la izquierda abertzale como Juan María Olarra, entre otros.

Otegi ha subido al estrado después de que lo hiciera su familia entre gritos en favor de la independencia y de los presos de ETA.

Tras una sesión de "bertsos", txalaparta y un aurresku, Otegi se ha hecho con el estrado y, aunque ha dicho estar un poco "desentrenado", ha ofrecido a los asistentes un mitin en toda regla.

El dirigente de Sortu, que ha utilizado en varias ocasiones el lenguaje acuñado por Podemos, su nuevo rival político y electoral, ha asegurado que "ahora que se habla de la nueva política" la izquierda abertzale ofrece a los vascos "un futuro nuevo".

Tras comentar que le han dicho que "Euskal Herria ha cambiado" durante su reclusión, aunque él no está "tan seguro", Otegi ha afirmado que se alegra "sinceramente" de que "haya mucha gente que vivía con escoltas, que vivía acosada, según decían ellos, y que hoy pueda vivir en paz y en libertad".

"Pero hoy lo que llevo en el corazón es a esas madres, a esos padres, a esos compañeras y compañeros que llevan 30 años haciendo la bolsa para la visita de las cárceles en el Estado francés y en el Estado español", ha dicho a continuación.

Ha tenido palabras de recuerdo al exsecretario general de LAB, Rafa Díez Usabiaga, preso en El Dueso (Cantabria) por el caso Bateragune, al tiempo que ha asegurado que no se podrá hablar de "situación normalizada en Euskadi" mientras haya 400 presos de ETA en prisión.

Tras recordar que la vicepresidenta del Gobierno, Soraya Saénz de Santamaría, ha dicho de él que debe estar en la cárcel porque es "un terrorista peligroso", el portavoz abertzale ha citado una canción de Los Chikos del Maiz en la que aseguran que "terrorismo es Manuel Fraga Iribarne asesinando a trabajadores en Vitoria".

Otegi ha rememorado el último homenaje que recibió en esta misma plaza, hace 7 años, cuando aseguró que la izquierda abertzale "traería la paz a este pueblo".

"Hemos cumplido", ha proclamado, tras lo que ha añadido que "todavía queda mucho camino por recorrer y no será fácil". "Ahora toca ganar, generar las condiciones que hagan posible la convivencia y la paz sí, pero la libertad y la igualdad también", ha argumentado Otegi.

En este punto, el secretario general de Sortu ha abogado por "hacer autocrítica", pero no porque se lo pidan "las élites de otros partidos, que están en su derecho", ni porque lo exija "la casta de Madrid", sino porque la izquierda abertzale "se debe a este pueblo".

Sobre su posible candidatura a lehendakari, Otegi no ha aclarado ninguna incógnita y ha dicho que en la izquierda abertzale ha habido muchos posibles lehendakaris, tras lo que ha citado a históricos fallecidos como Jon Idigoras, Jokin Gorostidi, Periko Solabarria y Txomin Ziluaga.

Ha admitido que la izquierda abertzale atraviesa "dificultades" y que su situación está "enredada", pero ha animado a todos los militantes presentes a luchar, tras lo que ha concluido su discurso asegurando que "la independencia es el único camino".