La CUP y Junts pel Sí (JxS) se han emplazado a reunirse y agotar los plazos hasta el domingo para alcanzar un acuerdo sobre la legislatura catalana, enfrentados no obstante sobre la idoneidad de Artur Mas como candidato de CDC y ERC a la Generalitat y que la CUP rechaza.

Después de que la Asamblea Nacional Catalana (ANC) haya exigido esta mañana de nuevo a los 72 diputados independentistas elegidos en las elecciones del 27S que sigan negociando para lograr un acuerdo que permita formar gobierno, la CUP y JxS han mostrado su disposición de una reunión antes del plazo límite para investir presidente, que finaliza el domingo, y evitar así nuevos comicios.

En este contexto, la CUP ha remitido una carta a los partidos y entidades soberanistas, entre ellos Junts pel Sí, CDC y ERC, a los que solicita una nueva reunión negociadora tras vetar la investidura de Artur Mas, e insisten en la necesidad de proponer a otro candidato que "refleje" el giro de Cataluña a la "izquierda".

Según explica la CUP en un comunicado, en la misiva dirigida a partidos y entidades independentistas solicitan ese encuentro y plantean, "si aún estamos a tiempo, una nueva candidatura a la Presidencia que refleje los cambios sociales y políticos de los últimos años y un plan de choque mucho más ambicioso".

Para la CUP esos dos aspectos son "claves para construir la mayoría necesaria para avanzar hacia la independencia", y se reafirma en su "compromiso de lucha y trabajo" hacia la independencia como "piedra angular" para la construcción de la República Catalana y un modelo social con "plena justicia social".

También Junts pel Sí se ha mostrado favorable a esa reunión, después de que la dirección del grupo parlamentario, encabezada por el presidente, Jordi Turull (CDC), la portavoz, Marta Rovira (ERC); y el diputado Raül Romeva (independiente), se haya reunido en el Parlament para analizar el veto de la CUP a investir a Mas.

Un encuentro en el que no han estado presentes el líder de ERC, Oriol Junqueras, ni el presidente en funciones y líder de CDC, Artur Mas, ya que estaba presidiendo la reunión del Govern esta mañana.

En declaraciones tras la reunión de JxS, Romeva ha asegurado hoy que su grupo parlamentario se pone a disposición de la CUP y las entidades soberanistas para reunirse y "agotar" los plazos para "desatascar" el actual bloqueo negociador, pero ha dejado claro que Artur Mas sigue siendo el candidato a ser investido presidente.

"Nos ponemos a disposición de un último intento. Y queremos ponernos a disposición de encontrarnos y en el tiempo que se nos diga para poder desencallar la situación. Tenemos obligación y el mandato democrático de agotar el calendario", ha dicho Romeva, que ha explicado que aún no se ha "concretado la hora" de dicha reunión.

Pero el que fuera cabeza de lista en el 27S ha sido tajante al ser preguntado sobre si JxS podría aceptar proponer otro candidato distinto: "En la mesa de negociación hemos puesto un paquete de medidas, y eso incluye el quién, y el nombre sigue siendo el que ha sido siempre. No es importante la investidura, sino hacer lo que tenemos el mandato de hacer", ha sentenciado.

Porque, ha dicho, "no se trata solo de investir un presidente y pasar el trámite de la investidura, sino empezar a caminar con garantías de que llegaremos al destino que nos hemos planteado

Romeva ha insistido en todo caso que la "oferta está hecha" a la CUP, que es "suficientemente amplia para permitir trabajar y va más allá de un nombre, va de plantear un camino. Planteamos una oferta y nos hemos encontrado que han valorado solo una parte de la oferta".

Pero preguntado sobre si confía en que la CUP se mueva ahora de su posición tras ya haber decidido vetar a Mas, Romeva dicho: "Tenemos el calendario aún vivo. Tenemos que intentar lo que haga falta. Hasta que no suene el pitido, tenemos la responsabilidad y obligación de intentarlo. Estamos dispuestos a explorar hasta la última gota de oportunidad que tengamos en nuestras manos.".

Frente de izquierdas

Por otra parte, hoy se ha dado a conocer que el Consejo Político de la CUP aprobó el pasado domingo un documento de estrategia en el que propone "articular" una "candidatura popular y de base" que agrupe "al conjunto de la izquierda catalana" en la defensa de un referéndum "unilateral" para unas eventuales elecciones autonómicas.

El documento, titulado "10 abstenciones para avanzar hacia la independencia para cambiarlo todo", fue aprobado tras la votación en la que se dio el "no" definitivo a la candidatura de Artur Mas al frente de la Generalitat de Catalunya, y recibió el aval de más de la mitad de los asistentes al Consejo Político.

Asimismo, el documento -al que ha tenido acceso Efe y que ha avanzado Catalunya Ràdio- critica el "inmovilismo partidista" de Catalunya Sí que es Pot y propone una alianza amplia de la izquierda catalana, además esta formación critica a los diputados autonómicos de Podem por pedir un avance electoral tras las elecciones generales al creer, "con dudosos fundamentos reales", que obtendrían un crecimiento electoral.

Ante un eventual avance electoral, la CUP propone construir una candidatura "amplia" que plantee "una propuesta sincera" del conjunto de la izquierda catalana que permita encontrar "una salida democrática a la confrontación con el Estado" mediante "un referéndum unilateral de independencia" y que acabe con la corrupción y la austeridad.

Más allá de la propuesta para configurar un "frente de izquierdas" catalán, en el texto de los anticapitalistas también se lamenta que ERC haya "transigido al chantaje" que Mas ejerce sobre el proceso independentista y subraya que la alianza de republicanos y convergentes "imposibilita" la creación de una mayoría de izquierdas.

Finalmente, el documento aprobado por la CUP denuncia que CDC ha pretendido "subyugar"el proceso independentista a los intereses de una parte de la burguesía y llama a combatir la "hegemonía política" de la derecha en el proceso independentista y a cambiarla de manos como "única garantía" para que éste llegue hasta las últimas consecuencias.