El Pleno del Congreso de los Diputados ha rechazado, con los votos del PP, la petición del PSOE de pedir al presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, que cese de su cargo a la ministra de Sanidad, Ana Mato, por su gestión al frente de la crisis sanitaria del ébola. También solicitaba la reprobación al consejero madrileño de Sanidad, Javier Rodríguez, por este asunto.

La petición de cese de Mato y reprobación de Rodríguez fue apoyada por Izquierda Plural, UPyD, PNV, Compromís-Equo y el BNG, mientras que CiU, ERC, Coalición Canaria, Foro de Asturias e incluso UPN (socio electoral del PP) han optado por la abstención. En la votación no estuvo presente la ministra de Sanidad ni ningún miembro del Gobierno.

En el debate, todos los grupos de la oposición han coincidido en la necesidad de invertir en prevención en África y se han preguntado quién va a asumir responsabilidades por la mala gestión emprendida por parte del Gobierno.

"Nunca se debe culpabilizar a la víctima", han coincidido el portavoz del PSOE y la de CiU, por ejemplo. Además, han alertado de que enfermedades similares pueden aparecer cualquier día, por lo que hay que estar preparado para ello.

Por su parte, el portavoz del PP en materia sanitaria, Rubén Moreno, ha rechazado que "toda la moción es una impostura", al mismo tiempo que ha criticado que la oposición se ofrezca a ayudar al Gobierno después de conocer el problema y apenas 24 horas después pida responsabilidades ministeriales.

Así, ha avisado al Grupo Socialista de que en Andalucía, donde gobiernan los socialistas, el protocolo es tal que si hay un infectado en Almería tendrá que ser trasladado en ambulancia hasta Sevilla para ser tratado, al ser la única ciudad con un centro de referencia habilitado para posibles casos de contagio.

"Los protocolos son dinámicos y si hay que cambiarlos se cambiarán. Nosotros no vamos a pedir la dimisión sino que mientras que haya ébola en África cualquier comunidad autónoma puede tener un caso en su territorio. Su jefe de filas tiene un don para el error y les pido que serenen su criterio porque en una guerra contra el ébola es necesario su apoyo. Son los profesionales sanitarios los que nos han enseñado a llevar con determinación esta crisis", ha agregado.

"Enormes errores" en la gestión del Gobierno

Desde el PSOE, José Martínez Olmos ha criticado los "enormes errores" que se han emprendido desde el Ejecutivo en la gestión de esta crisis sanitaria "y que han llevado a que el propio Gobierno asumiera una propuesta de Pedro Sánchez de crear un comité de crisis y poner al frente a la vicepresidenta". "No se puede tapar los ojos. Tiene que proceder a cesar a Mato. Está desautorizada", ha insistido el socialista.

Igualmente, ha argumentado su petición de reprobación al consejero madrileño de Sanidad en que ha habido "momentos memorables" en la ejecución que ha emprendido al respecto la Comunidad de Madrid.

"El Gobierno no puede tapar sus vergüenzas en la gestión de esta crisis de salud pública", ha insistido, a la vez que ha pedido un reconocimiento al papel desempeñado por los profesionales sanitarios que han atendido a la auxiliar Teresa Romero.

Gaspar Llamazares, de la Izquierda Plural (IU-ICV-CHA), ha celebrado que hayan pasado unos días y Teresa esté curada, al mismo tiempo que ha avisado de que el virus permanece y está descontrolado en África. A su juicio, el no reconocimiento del "error político" del Gobierno puede significar no poner en marcha las medidas necesarias para prevenir nuevos contagios.

Desde UPyD, Rosa Díez, ha visto "muy favorablemente esta iniciativa" ante la forma en la que el Gobierno ha gestionado esta crisis del ébola por un lado en el diagnóstico, y por otro en las medidas emprendidas, a la vez que se ha preguntado si alguien va a asumir responsabilidades desde el Gobierno.

Joseba Agirretxea, del PNV, ha avisado de que Mato es la responsable de la gestión de la crisis del ébola y no la responsable del contagio del virus. "Parece que la ministra no ha tenido humildad política en esto", ha lamentado. "Hay que invertir en la prevención. La ministra gestionó mal por incapacidad o por confiar en personas que le decían que todo estaba bien. La crisis no acaba más que empezar y hay que buscar soluciones futuras", ha reclamado.

Joan Baldoví, de Compromís Equo y Rosana Pérez, del BNG, por su parte, han coincidido en que deben investigarse y depurarse responsabilidades en la gestión emprendida sobre el ébola por parte del Gobierno.

La abstención de CIU

Mientras, Conxita Tarruella, de CiU, cree que hay que llegar al fondo de cómo se ha llevado a cabo la gestión de la crisis, al mismo tiempo que ha insistido en que hay que mejorar la política de comunicación desde el Gobierno por mantener informada a la población.

Eso sí, CiU se ha abstenido porque ve "más importante" terminar la investigación, informar a la sociedad, antes que pedir "dimisiones precipitadas". "Ya llegará el momento porque creemos que habrá que hacer más evaluación", ha concluido.

La iniciativa socialista, que finalmente se ha pactado con Izquierda Plural y UPyD, solicitaba también la restitución del Carlos III como centro de referencia en materia de enfermedades infecciosas, como el ébola, proponía la homogeneización, coordinación y ejecución de las medidas de prevención, difusión y actuación destinadas a controlar posibles epidemias en España, así como a establecer centros de referencia a nivel nacional en esta materia.

Igualmente, planteaba la revisión continuada de los protocolos, de acuerdo con la OMS y la UE, a facilitar el envío sanitario a las zonas afectadas, así como adoptar las medidas necesarias para que la base logística de Gran Canaria se convierta en un puente aéreo con capacidad de evacuación, plataforma de escalas, de tránsito y de refuerzo logístico.

"Estas acciones se implementarán bajo el auspicio de Naciones Unidas y la OMS, que ejerce el liderazgo técnico de la respuesta humanitaria internacional al virus, y en colaboración con las organizaciones humanitarias españolas desplegadas en la zona", sentenciaba el texto.