El Instituto de Toxicología estudia ya todas las muestras recogidas aquí. En el interior de la vivienda de la familia Caño.

Porque la investigación ha determinado que la intoxicación procede del propio domicilio familar. Se estudia el agua, el gas, la estufa o la comida. Y aunque todavía no se descartan esas opciones, todo apunta a otra, a una toxina; una sustancia que estaba en la casa y que pudo contaminar los alimentos que cenó la familia.

Posiblemente el pescado, que fue lo que tomaron los 3 fallecidos. La niña pequeña, ingresada sólo por precaución, comió un bocadillo de jamón.

Su padre acababa de comprarlo en un supermercado de Alcalá donde también recogía cartones para después venderlo. Hoy en el barrio todos los vecinos hablan de los fallecidos como gente muy trabajadora. También niegan que se alimentaran de la basura. Además un grupo de vecinos se manifestaba de nuevo frente al Ayuntamiento. Aunque no hubo la tensión de ayer.