El extesorero del PP Luis Bárcenas ingresó este jueves en la cárcel madrileña de Soto del Real después de que el juez de la Audiencia Nacional Pablo Ruz haya decretado su prisión incondicional.

El juez tomó esta decisión por entender que hay riesgo de fuga, ante la "presunción de contar con patrimonio en el extranjero de difícil control e incautación judicial" tanto en Suiza, como EEUU, Uruguay y Bahamas, y por el peligro de que destruya pruebas o influya en testigos.

Bárcenas llegaba poco antes de las diez de la mañana a la Audiencia Nacional, entre abucheos y gritos de "golfo" y "ladrones", para comparecer ante Ruz, que le había citado para que le diera explicaciones del origen de su fortuna de 48,2 millones de euros en Suiza, después de comprobarse que sus negocios de compraventa de cuadros no se corresponden con operaciones reales, sino más bien de blanqueo de capitales.

Tras declarar durante dos horas, y esperar a que comparecieran también su mujer Rosalía Iglesias y su presunto testaferro, Iván Yáñez, se ha celebrado la preceptiva vistilla de las medidas cautelares en la que la Fiscalía Anticorrupción ha pedido prisión, apuntando a que Suiza había alertado de que Bárcenas ha trasladado fondos a EEUU y Uruguay desde sus cuentas suizas no bloqueadas.

Desde ese momento, Bárcenas ha tenido que aguardar en la Audiencia Nacional unas cuatro horas para conocer la decisión del juez con la única compañía de su abogado, Alfonso Trallero, ya que su mujer, tras declarar durante 45 minutos, ha abandonado la sede del tribunal a las 13.30 horas.

Esta decisión se produce casi cuatro años después de su imputación en el caso Gürtel, del que fue desimputado en 2011 cuando la causa se tramitaba en el Tribunal Superior de Justicia de Madrid, y en el que volvió a estar imputado en marzo de 2012.

Cuando Ruz recibió la primera comisión rogatoria del Dresdner Bank en enero informando de que Bárcenas tenía allí cuentas en las que llegó a acumular 22 millones de euros, el juez le impuso en febrero como medidas cautelares comparecencias quincenales, la retirada del pasaporte y prohibición de salir de España.

Ahora, para el juez la situación del extesorero se ha agravado tras conocerse una nueva comisión rogatoria sobre sus cuentas en otra entidad en Suiza, Lombard Odier, en la que atesoró un máximo de 26,2 millones de euros, lo que elevaba su fortuna a 48,2 millones de euros en 2008.

Bárcenas siempre ha justificado este dinero en operaciones de compraventa de cuadros o en sus "afortunadas" inversiones en Bolsa, pero el juez no le cree y por eso le llamó a declarar.

Sobre los contratos de compraventa aportados, Ruz ya manifestó que no reflejarían "operaciones reales", lo que le valió al matrimonio la imputación de tres nuevos delitos: falsedad documental, estafa procesal en grado de tentativa y blanqueo de capitales, motivo por el que les llamó a declarar.

Según el auto de prisión, el extesorero ha ofrecido una "explicación parcial, inconsistente y manifiestamente insuficiente sobre el conjunto de actividades y operaciones patrimoniales en las que el mismo interviene a través de sus cuentas en Suiza", y ha entrado en contradicción con las notas de los gestores de sus cuentas y con su presunto testaferro, Iván Yzñez, que hoy también ha prestado declaración.

El juez también motiva la prisión en "la capacidad del imputado para acceder por sí o a través de terceros a las fuentes de prueba o para influir sobre otros imputados, testigos o peritos", ante "la posición pública y patrimonial" que ostenta Bárcenas.

Entre esos testigos, Ruz destaca a la pintora argentina Isabel Mackinley, quien testificó en su días que actuó como intermediaria de una compraventa ficticia de cuadros, supuestamente propiedad de la mujer del extesorero, Rosalía Iglesias.

En su comparecencia de hoy, la novena que hace en relación a esta causa, ha descalificado el testimonio de Mackinley señalando que padece "enajenación mental", por lo que ha anunciado que la demandará y pedirá que se la someta a una pericial psiquiátrica.

Para cambiar la situación procesal de Bárcenas, el juez destaca el "ingente acervo indiciario acumulado" de la participación del extesorero "en diversos delitos sancionados todos ellos con penas de prisión de diversa duración, en algunos supuestos de hasta seis años", en el caso del delito de blanqueo de capitales.

Presunto fraude a Hacienda

Bárcenas esta también acusado de defraudar a Hacienda más de seis millones de euros, lo que eleva aún más la penalidad y con ello el riesgo de fuga, unido además a la "elevada" petición del fiscal de imponerle una fianza por responsabilidad civil de 28,1 millones de euros.

El extesorero del PP abandonaba la Audiencia Nacional en un furgón policial, entre un grupo de personas que gritaba "¡Bárcenas, cabrón!", e ingresaba en la cárcel de Soto del Real a las 20.15 horas.