La investigadora Consuelo Guerri, del Centro de Investigación Príncipe Felipe (CIPF) de Valencia, destinará los 25.000 euros de un premio a sufragar los salarios de becarios y continuar con las investigaciones que realiza desde hace más de treinta años en torno a los efectos del alcohol.

"Los investigadores nos tenemos que arreglar como sea para no hundirnos", ha asegurado a Efe Guerri, quien considera que los políticos "no se dan cuenta de que la ciencia en general es importante para el desarrollo de un país".

Aunque reconoce que la situación es mala "y si tienen que recortar lo recortan todo", los científicos que deben abandonar una investigación durante uno o dos años por los recortes "tardan hasta diez años en remontar otra vez".

Consuelo Guerri ha explicado que tiene una carrera desde hace 35 años "y no se lo que va a pasar ahora", por ello todo el dinero que recibe de premios, conferencias o clases lo destina a sus investigaciones, "ya que si me hundo en este momento después va a ser muy difícil remontar".

La investigadora, jefa del Laboratorio de Patología Celular del CIPF, considera "algo normal" destinar el dinero que gana a sus investigaciones, y señala que conoce a otros investigadores que hacen lo mismo.

Sus investigaciones en torno a los trastornos que el consumo de alcohol producen en las mujeres embarazadas, los adolescentes y los adultos son las que le han llevado a recibir este premio de 25.000 euros, que recogió a principios de septiembre en Suiza.

El dinero fue a formar parte de un remanente que tiene en el propio CIPF, y donde ya ha ingresado distintas cantidades conseguidas por dar clases o conferencias, y que es de libre disposición para destinarlo a lo que ella quiera.

Es importante tener este dinero y más en este momento en el que viene una época en la que quizá nuestros proyectos se recorten", ha afirmado la investigadora, quien ha explicado que lo destinará para sus investigaciones, tanto para pagar a becarios como para cualquier material que se precise.

Según Consuelo Guerri, tener este dinero "me da mucho relajo a la hora de seguir trabajando y porque los becarios son una mano de obra muy importante en el laboratorio".

En estos momentos tiene en marcha cuatro proyectos de investigación sobre la repercusión que tiene el consumo de alcohol durante la gestación en el desarrollo del niño, durante la adolescencia y durante la edad adulta.

Según ha explicado, el consumo de alcohol en la mujer cuando aún no sabe que está embarazada es "muy crítico" y pude llegar a provocar malformaciones y problemas en el desarrollo del feto, e incluso los consumos moderados de alcohol durante el embarazado puede afectar a las conductas futuras del niño.

Otra de las investigaciones realizadas por Guerri ha demostrado los efectos del alcohol, y concretamente del botellón, sobre el desarrollo del cerebro en la adolescencia. "El cerebro es plástico y el alcohol puede romper esa plasticidad", ha dicho.

Se hizo un modelo experimental con ratas a los que daban botellones intermitentes los fines de semana y se comprobó que les repercutía en el aspecto con el aprendizaje o la actividad motora.