PSOE y PP han acordado incluir en la nueva ley de víctimas que está en tramitación en el Congreso la derrota "definitiva, incondicional y sin contrapartidas" del terrorismo, respondiendo a la petición de las asociaciones de víctimas y con el objeto de dejar claro que los terroristas "no pueden pretender la obtención de rédito alguno como consecuencia de su acción criminal".

Los dos principales partidos han presentado este martes de forma conjunta un total de 35 enmiendas a la proposición de Ley de reconocimiento y protección integral a las víctimas del terrorismo, manteniendo así la unidad con la que registraron todos los grupos parlamentarios la iniciativa en el Congreso hace ya más de ocho meses.

Entre sus propuestas, socialistas y 'populares' han acordado introducir un párrafo por el que, de acuerdo con los principios de memoria, dignidad, justicia y verdad, "el Estado reitera su compromiso de perseguir la derrota definitiva, incondicional y sin contrapartidas del terrorismo en todas sus manifestaciones".

Esta iniciativa surge de las peticiones formuladas por las asociaciones de víctimas ante la Comisión de Interior para exponer sus principales reivindicaciones y propuestas de mejora del texto. Tras su paso por el Congreso, la AVT, Covite, Dignidad y Justicia, Fundación Miguel Ángel Blanco y Fundación Gregorio Ordóñez se unieron para presentar un texto con siete enmiendas de "mínimo" que entregaron a todos los partidos con representación en el Congreso.

Entre sus exigencias, incluyeron una derrota del terrorismo entendida como desaparición total, unilateral y sin contrapartidas, la no existencia de ningún tipo de negociación o diálogo previo al fin de ETA e impedir la presencia del entorno abertzale en las instituciones, así como garantizar la no impunidad de los crímenes terroristas.

En las enmiendas consensuadas, PSOE y PP también incluyen un reconocimiento al papel de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y a las Fuerzas Armadas en la lucha contra el terrorismo "por la eficacia siempre demostrada en la lucha contra la amenaza terrorista y porque, lamentablemente, son las que han aportado el mayor número de víctimas mortales y de heridos".

De la misma manera, resalta el papel de los colectivos de víctimas, asociaciones y fundaciones en el ámbito de la memoria y de la solidaridad entre las víctimas, a quienes califica como "un pilar fundamental en el apoyo a las familias que han sufrido el zarpazo del terror".

Además, atribuyen a los poderes públicos la responsabilidad de trabajar por impedir la impunidad de los crímenes terroristas en cualesquiera de sus manifestaciones y velar para que los terroristas cumplan íntegramente sus penas.

Otra de las novedades consensuadas por socialistas y 'populares' es la ampliación de la consideración de víctima del terrorismo a los hermanos, abuelos y nietos, así como a las víctimas de atentados que resultaron ilesos. Eso sí, precisa que esta consideración es a efectos honoríficos y de condecoraciones, "sin derecho a compensación económica alguna".

Asimismo detalla las funciones de la Oficina de Información y Asistencia a las Víctimas del Terrorismo de la Audiencia Nacional, entre las que sitúa la obligación de facilitar información sobre el estado de los procedimientos que afecten a las víctimas del terrorismo, asesorar a las víctimas en todo lo relacionado con los procesos penales y contencioso-administrativo que les afecten y ofrecer acompañamiento personal a los juicios que se celebren en relación a los actos terroristas de los que traigan causa los afectados.

También incluye entre las atribuciones de la oficina el establecimiento de cauces de información a la víctima acerca de todo lo relacionado con la ejecución penitenciaria, hasta el momento del cumplimiento íntegro de las penas. "Particularmente, en los supuestos que supongan concesión de beneficios o excarcelación de los penados", establece.

Además, para contribuir al relato de lo ocurrido, concienciar a la población y preservar los valores de las víctimas, las enmiendas contemplan la creación de un Centro Nacional para la Memoria de las Víctimas del Terrorismo con sede en el País Vasco.