Los partidos políticos mayoritarios flirtean con los manifestantes que se concentran en varias ciudades españolas, especialmente en la Puerta del Sol de Madrid, para protestar contra la crisis económica y los políticos.

A dos días de que termine la campaña electoral, todos expresan su respeto y comprensión a los "indignados", salvo algunos dirigentes del PP que, como Esperanza Aguirre, se preguntan por qué se plantan delante de su casa -en la Puerta del Sol está la sede del gobierno regional de Madrid- y no se van a la Moncloa.

Teme Aguirre que la izquierda esté intentando manipular este movimiento, al que los políticos en general le piden que concrete sus propuestas y que, en cualquier caso, las canalice en las urnas.

"El voto es la expresión para ser crítico y exigente", ha dicho José Luis Rodríguez Zapatero en Cáceres, que teme que la abstención regale la victoria al PP.

Dicen que hay gente de todas las edades pero que la mayoría son jóvenes y, casualidades de la vida, hoy Zapatero ha hablado de becas y Mariano Rajoy ha prometido "un plan de choque nacional para acabar con el paro juvenil".

Rajoy es de los más comprensivos, hasta el punto de que esta mañana decía entender que se produzcan estas cosas y admitía: "Los partidos, evidentemente, no acertamos siempre, porque a fin de cuentas, somos seres humanos".

La portavoz del PP en el Congreso, Soraya Sáenz de Santamaría, ha pedido a los que protestan que recuerden que su partido cuando llegó al poder en 1996 "supo crear empleo" y reducir el paro entre los jóvenes.

Pero si desde el PP muestran respeto y hacen guiños a los jóvenes, algunas voces del PSOE van más allá y, así, el presidente del Congreso, José Bono, se ha mostrado partidario de la reforma de la Ley Electoral, como piden en las concentraciones.

Otro socialista castellanomanchego, el presidente de la comunidad, José María Barreda, ya habla directamente de cambiar el funcionamiento de los partidos y de abrirlos a los jóvenes.

Izquierda Unida se ha puesto desde el principio del lado de los manifestantes con los que algunos medios dicen que comparten ciertos lemas y simbología.

Su coordinador general insiste en que "los indignados" están -como él- en contra del bipartidismo y de los banqueros, y por eso critica que se prohíban acampadas y manifestaciones y pide rebeldía.

El caso es que estas movilizaciones están condicionado ya claramente los mensajes y los comportamientos de los candidatos en la campaña electoral, y como muestra un botón:

#notenemosmiedo es una de las etiquetas con las que los convocantes y seguidores de las protestas se comunican en internet y quizá ha sido inspiración o casualidad que el candidato del PP a la Alcaldía de San Sebastián, Ramón Gómez, se haya sumergido hoy entre los tiburones del Aquarium de San Sebastián para demostrar que "no tiene miedo al futuro" y que está preparado para ser alcalde.